Sorpresa la que se llevó un ciudadano al que se le fue la mano con el alcohol este martes en Tudela. Hasta tal punto que no era capaz de escuchar las voces que le invitaban a marcharse del local, ni reaccionar a las indicaciones de los propietarios.
Sucedió en un local de hostelería de la calle Fuente Canónigos de la capital ribera. había bebido tanto que se quedó dormido. Los dueños del establecimiento, a la hora del cierre, conminaron al hombre a que abandonara el local, pero a duras penas atendía lo que le estaban diciendo. Por más que lo intentaron, no consiguieron hacer que se moviera, por lo que decidieron solicitar la intervención de la Policía Municipal de Tudela.
Según relatan, los agentes llegaron al local sobre las 22:00 horas y trataron de despertar al hombre, pero no fue posible. A duras penas abría los ojos y continuaba con el sueño.
A base de insistir consiguieron finalmente identificarle y espabilarle un poco, pero fue necesaria "mucha insistencia" para que depusiera su intención de buscar la horizontal. A base de paciencia de los agentes y al enésimo intento, el sujeto accedió a salir del local y sus dueños pudieron por fin echar la persiana.
