Alterado y desafiante se mostró este hombre de 61 años al presentarse ante él el coche patrulla de la Policía Foral en Barillas.
Una patrulla de seguridad vial de la comisaría de Tudela, ha detenido en Barillas a un vecino de Cabanillas del Campo (Guadalajara), R.M.C. de 61 años y con antecedentes relacionados. Además se le imputan otros dos delitos por daños y amenazas.
Los agentes recibieron un aviso por una discusión en Monteagudo. Uno de los implicados se había marchado conduciendo un vehículo y según varios testigos podía ir influenciado por la ingesta de bebidas alcohólicas. Fue localizado en Barillas gracias a la colaboración ciudadana.
Desde el primer momento el detenido se mostró muy alterado, desafiante y poco colaborador con los agentes, no queriendo ni facilitar su nombre. A pesar del intento por parte de los policías de tranquilizar al hombre, éste comenzó a insultar y amenazar hasta el punto de intentar agredir a uno de los agentes, momento en el que fue detenido.
Tras la detención y primera lectura de sus derechos R.M.C. no cejó en su actitud. Continuó insultando y amenazando mostrando gran resistencia al ser trasladado a dependencias policiales, produciendo daños en una de las puertas traseras del vehículo oficial (se pueden apreciar en la imagen).
Se encarga de las diligencias el Juzgado de 1ª Instancia e Instrucción Nº 5 de Tudela.
DETENIDO UN JOVEN POR HERIR A UN AGENTE
Asimismo, y dentro de estas últimas 3 detenciones que ha llevado a cabo la Policía foral por delitos de desobediencia a los agentes, el cuerpo ha detenido a un joven de 24 años que estuvo implicado en una pelea.
Se trata de D.B.R, a quien una patrulla de prevención intentó hasta en seis ocasiones que se identificara tras su implicación en una pelea. Ante la continua y reiterada negativa de éste, le informaron que iba a ser detenido por desobediencia por lo que reaccionó golpeando a uno de los agentes, causándole heridas superficiales en un brazo y contusiones en codo, pierna, manos y muñecas.
Debido al grado de violencia y agresividad en el que se encontraba, una patrulla de la Policía Municipal de Tudela tuvo que colaborar en la detención. Una vez detenido continuó con su actitud insultando y amenazando a los policías.
Asimismo, y al igual que este joven, una mujer tuvo que ser detenida en la capital ribera tras una discusión con su pareja. Reaccionó también de forma violenta contra los agentes.
