Además, durante el fin de semana, agentes de Policía Foral han imputado a dos personas por delitos contra la seguridad vial.
La Policía Foral ha tenido que resolver diversas situaciones en las carreteras navarras relacionadas con accidentes de tráfico y pruebas de alcohol.
La mayoría de los siniestros se han saldado con daños materiales o heridos leves, aunque el más grave se produjo en la noche del sábado un turismo atropelló en Cizur Menor a una vecina de 76 años, que resultó herida muy grave. Fue trasladada al Complejo Hospitalario de Navarra y la Brigada de Atestados de Policía Foral se ocupa de investigar el accidente.
Durante el fin de semana, agentes de Policía Foral han imputado a dos personas por delitos contra la seguridad vial, que se suman a otros tres detenidos y un imputado en los últimos días en las carreteras navarras.
En Pamplona, agentes del Grupo de Delincuencia del Automóvil observaron un turismo que realizaba una conducción irregular por el barrio de San Juan. Al sospechar que su conductor podía encontrarse influenciado, decidieron darle el alta y observaron claros síntomas de que había consumido bebidas alcohólicas.
Por ello, solicitaron la presencia de una patrulla con un etilómetro de precisión, que comprobó que el conductor (vecino de Pamplona de 29 años y con antecedentes por hechos similares) triplicaba la tasa permitida.
Por otra parte, en Tudela agentes adscritos a esa comisaría realizaban un patrullaje preventivo cuando detectaron un vehículo de alta gama que conducía a elevada velocidad. Los policías le dieron el alto y comprobaron que su conductor (vecino de la localidad de 38 años y con antecedentes por hechos similares) podía encontrarse bajo la influencia de bebidas alcohólicas. Al realizar las pruebas con un etilómetro de precisión, comprobaron que casi cuadruplicaba la tasa permitida.
En cuanto a las intervenciones de los últimos días, en Tudela agentes de seguridad vial realizaban un control preventivo cuando dieron el alto a un turismo, cuyo conductor hizo caso omiso y se dio a la fuga. Los policías lo interceptaron 300 metros después y observaron que desprendía un fuerte olor a alcohol. El conductor, francés de 54 años, realizó las pruebas de detección de alcohol y superó la tasa permitida. Al no tener domicilio en España, fue detenido.
Además en Urdax se detuvo a otra conductora, de 43 años y nacionalidad francesa, por triplicar la tasa permitida. Circulaba con un vehículo con el que protagonizó un accidente en una gasolinera y al someterse a las pruebas triplicó la tasa de alcohol permitida.
Finalmente, en Huarte, un ciudadano alertó a una patrulla de seguridad vial de un vehículo que realizaba una conducción irregular. Los agentes localizaron al conductor sospechoso acercándose hacia donde se encontraban cuando el turismo que conducía provocó una colisión. Los policías acudieron y comprobaron que el conductor se encontraba influenciado, por lo que realizaron las pruebas de detección de alcohol, en las que triplicó la tasa permitida. Por todo ello, se le imputó un delito contra la seguridad vial.
