Cáritas Diocesana Pamplona – Tudela ha informado de que "el pasado viernes 22 de abril, la sede de la entidad amaneció con la rotura y pasquines en las cristaleras de sus oficinas situadas en el Casco Viejo de Pamplona".
La asociación patronal OEIS (Asociación Estatal de Organizaciones de Acciones e Intervención Social), a la que pertenece Cáritas junto con Secretariado Gitano, Cruz Roja, Acción Contra el Hambre y Acción Española contra el Cáncer, ha impugnado el I Convenio de Intervención Social de Navarra. La vista judicial se celebrará el próximo 17 de mayo de 2022.
Desde Cáritas, en un comunicado, ha señalado que "históricamente trabajamos por el acceso al empleo de las personas en riesgo de exclusión, defendiendo sus derechos y denunciando cualquier condición que suponga precariedad laboral".
"En coherencia, defendemos y promovemos unas condiciones laborales dignas para todas las personas trabajadoras, y en especial para las del Tercer Sector, que es en el que se engloba la entidad", ha añadido.
En este sentido, Cáritas asegura que "eI Convenio de Intervención Social de Navarra genera disfunciones y desigualdades perjudicando a largo plazo al Tercer Sector".
"Tras los daños sufridos en nuestra sede de Pamplona condenamos y denunciamos cualquier forma violenta y de presión, así como el acoso sufrido por la entidad para exigir la retirada de la impugnación judicial", ha destacado.
Por su parte, la OEIS, "ante el crecimiento de las campañas de desprestigio y actos vandálicos frente a las organizaciones" que constituyen esta asociación, la más representativa a nivel nacional, ha manifestado que la impugnación que ha llevado a cabo frente al convenio, "en ejercicio de su derecho fundamental a la tutela judicial efectiva, se ha efectuado en defensa de su legitimación para participar en la negociación del mismo de acuerdo con la legislación vigente".
OEIS ha explicado que está constituida "por algunas de las organizaciones sin ánimo de lucro de atención a las personas más significativas de España" y ha señalado que tiene entre sus objetivos construir un sector de intervención social que "dignifique las condiciones de trabajo de las personas que prestan servicios en el mismo". Además, ha reivindicado su "derecho a ser escuchada en la construcción de las relaciones laborales dentro del sector", manifestando "en todo momento y como siempre" lo ha hecho, su "predisposición a un diálogo abierto y constructivo con la totalidad de las organizaciones e instituciones afectadas".
