Se situaron a cuatro kilómetros de distancia en horizantal y sólo 122 metros de distancia vertical.
Dos aviones de la compañía aérea de Ryanair estuvieron a punto de colisionar en pleno vuelo cuando sobrevolaban el espacio aéreo de la Comunidad foral el pasado 2 de octubre sobre las 15.30 horas.
A 30 kilómetros de Pamplona, los sistemas anticolisión se activaron a nivel máximo cuando dos naves (Boeing 737-800) que realizaban las rutas de Santiago – Mallorca y Sevilla – Toulouse se situaron a cuatro kilómetros de distancia en horizontal y 122 metros de distancia vertical, según ha adelantado la Voz de Galicia, que ha tenido acceso a un informe preliminar realizado por la Comisión de Investigación de Accidentes e Incidentes de Aviación Civil (Ciaiac).
El incidente ha sido catalogado como “grave” por este organismo dependiente del Ministerio de Fomento del Gobierno de España y, en estos momentos, todavía se está investigando para conocer qué ocurrió a 10 kilómetros de altura sobre el territorio navarro.
Al parecer, según dictamina el escueto informe, “los sistemas anticolisión en vuelo de ambas aeronaves se activaron para la resolución de conflicto”. En ese momento, los dos aviones se encontraba “en frecuencia” con el centro de control del área de Madrid.
Afortunadamente, no hubo que lamentar ninguna tragedia y ambos vuelos siguieron sus rumbos sin que los pasajeros a bordo se percataran de nada.
No obstante, la investigación de este hecho sigue su curso.
