Crece la preocupación en torno al futuro de la planta navarra de Volkswagen. La noticia conocida ayer de que Seat Martorell absorberá una parte importante de la producción de vehículos asignada a Landaben a partir de 2026 ha caído como un jarro de agua fría no sólo en la factoría de Pamplona, sino en multitud de empresas auxiliares que trabajan para Volkswagen y de familias navarras que viven del sector de la automoción.
Y es que el presidente del comité de empresa de Volkswagen Navarra, Alfredo Morales ha asegurado en Onda Cero que "de llevarse esta fabricación Volkswagen Navarra no podría mantener la actividad de la plantilla”, dejando entrever que la marca alemana se vería en la necesidad de despedir personal.
El comité de empresa pidió ayer en esta emisora de radio que “Navarra tenga lo que se merece”, es decir, “un proyecto industrial a partir del año 2026 donde no se deje a nadie fuera, tanto plantilla como tejido industrial”, subrayando que es ahí donde creen que tanto ejecutivo foral como central deben apretar.
Morales incidió en que tanto el Gobierno de Navarra como el Ejecutivo central “tienen un papel muy importante” porque si el grupo Volkswagen se lleva “ingentes cantidades de dinero público por parte de todos, como mínimo hay que exigirle que mantenga los proyectos y los acuerdos firmados”.
La consejera de economía y portavoz del Gobierno, Elma Saiz, anunció ayer una reunión inminente con el comité de empresa de VW Navarra. Una petición que llega desde los sindicatos quienes no saben cuándo tendrá lugar dicho encuentro. Morales aseguró que no tener “ninguna duda de que el ejecutivo estará a la altura”.
