El grupo automovilístico alemán Volkswagen tuvo en el primer trimestre un beneficio neto atribuido de 405 millones de euros, un 86,1 % menos que en el mismo periodo del año anterior.
Volkswagen informó este miércoles de que la facturación bajó entre enero y marzo hasta 55.000 millones de euros, un 8,3 % menos que un año antes (60.012 millones de euros un año antes).
El resultado operativo se redujo en el primer trimestre hasta 904 millones de euros, un 76,6 % menos que un año antes (3.868 millones de euros), debido a las turbulencias de los precios de las materias primas y en los mercados de capital, que han reducido el valor de algunos derivados de materias primas y creado efectos negativos en las divisas de 1.300 millones de euros.
Se reducen las ventas, la facturación y el resultado operativo como consecuencia del impacto de la pandemia.
El director financiero, Frank Witter, dijo: "Hemos tomado numerosas medidas para reducir costes y asegurar la liquidez".
La posición de liquidez de la división de automoción se mantiene sólida con 17.800 millones de euros al cierre del primer trimestre.
El grupo ha comenzado la reanudación gradual de la producción en sus fábricas. En concreto, en la planta de Landaben se reactivó la actividad laboral este pasado lunes tras mes y medio de parón por el coronavirus.
La planta de Volkswagen Navarra ha vuelto este lunes a la producción tras mes y medio de parón por la pandemia del coronavirus.
El grupo Volkswagen ha retirado sus pronósticos de beneficio para el 2020, tras la notable caída del resultado operativo en el primer trimestre por los efectos de la pandemia de coronavirus.
No podrá alcanzar los resultados que esperaba para este año y las entregas y la facturación bajarán notablemente en 2020 respecto a 2019 como consecuencia de la pandemia.
No obstante, el grupo VW prevé lograr un beneficio operativo este año, aunque muy por debajo del obtenido el año pasado.
