La marca VW ha reducido en 2020 el beneficio operativo antes de extraordinarios hasta 454 millones de euros, un 88 % menos que en 2019, tras la caída de las ventas por la pandemia. De hecho, en el caso de la planta Navarra, la factoría de Landaben ha anunciado un 'parón' en su producción.
La marca VW ha presentado este miércoles en una rueda de prensa virtual las cifras del balance de 2020 y sus pronósticos para este año, un día después de que el grupo Volkswagen presentara el suyo.
La facturación de la marca VW se redujo el año pasado hasta 71.100 millones de euros (-19,6 %) y las entregas cayeron hasta 5,3 millones de unidades (-15,9 %).
El consejero delegado de la marca VW, Ralf Brandstätter, dijo al presentar las cifras: "hemos gestionado con éxito la pandemia del coronavirus con una estricta disciplina de costes y una fuerte dirección de ventas".
"Así también pudimos impulsar con fuerza nuestra transformación en este año excepcional", añadió Brandstätter.
La marca Volkswagen, que en 2020 destinó una inversión de 2.700 millones de euros en nuevas tecnologías, prevé alcanzar los primeros hitos de la nueva estrategia Accelerate (Acelerar) este año.
Quiere reducir más los costes fijos en un 5 % y de materiales en un 7 % antes de 2023 para incrementar la productividad en un 5 % anual y lograr que todas las regiones tengan beneficio a largo plazo, según esta nueva estrategia presentada el 5 de marzo.
Las entregas de vehículos eléctricos superarán las 450.000 unidades en 2021, duplicando la cifra del pasado año.
De ellas 300.000 unidades serán vehículos basados en la plataforma modular para eléctricos MEB y alrededor de 150.000 vehículos híbridos.
La compañía invertirá 16.000 millones en los próximos cinco años en electrificación y digitalización.
