"Este libro es para leerlo a sorbos, sin prisa, con pausa, como el vino que se aprecia, que gusta y se degusta", han afirmado en la presentación del libro.
Dicen Los Rodríguez en Mi enfermedad, “me entrego al vino porque el mundo me hizo así, no puedo cambiar…” y no cabe duda de que esa patología la tenemos interiorizada 34 personas.
En concreto, los distintos miembros de la Asociación Navarra de Escritores y Escritoras se han servido de de Letras y caldos para elaborar El alma del vino (Ediciones Eunate). Se trata de una publicación colectiva elaborada entre 34 vendimiadores, que han manifestado querer "sacar el jugo a nuestra imaginación para ofrecer un buen caldo".
Las catas más exigentes, como las que se celebraron en Olite y Pamplona hace poco, han dado la razón a esta cosecha joven, y agricultores, enólogos, bodegueros y demás lectores levantaron la copa y el libro en señal de reconocimiento, ha señalado la asociación. Un reconocimiento que han querido devolver dentro y fuera de Navarra, porque "este libro está escrito principalmente desde aquí, pero no tiene fronteras" y, de hecho, ya cuenta con ejemplares desde Baracaldo hasta Jerez.
DESCORCHE DE TOMÁS YERRO
Desde la asociación afirman que "cuando uno visita un restaurante, le ofrecen un vino que prueba y aprueba". El lector, al abrir las páginas de esta obra colectiva, se encontrará "con el buen sabor de boca que deja la deliciosa pluma de Tomás Yerro en su prólogo, una persona que cuida el lenguaje con el mismo mimo que el agricultor la viña, y que siempre descorcha la palabra precisa en sus textos".
A través de El alma del vino, no saben si impreso en 'tinta o en tinto', dan un paseo por los viñedos navarros de la mano de Mª Luz Arbalán; cruzan puentes con Carlos Bassas del Rey; conocen los efectos rompedores del vino gracias a Isabel Hualde; y deja buen poso, tal y como relata Carlos Ollo Razquin; y mejor retrogusto, según asegura Miguel Campion.
"Este libro es para leerlo a sorbos, sin prisa, con pausa, como el vino que se aprecia, que gusta y se degusta. Leámoslo con moderación, pues si lo hacemos de un trago, tendremos un serio problema, como señala Javier Rey Bacaicoa", ha afirmado la entidad en la presentación. "Existe un racimo de amantes de las letras de pura cepa que, durante este otoño, nos hemos dado al vino, así que ahora toca paladearlo. ¡Beban literatura navarra!", han agregado.
"Y no revelo ningún secreto de Begoña Pro Uriarte al levantar este caldo joven, con la esperanza de racimar nuevas cosechas y poder seguir entonando que “me entrego al vino porque el mundo me hizo así, no puedo cambiar…”.
