Beatriz Caballero Zubia ha analizado las edificaciones que impulsó el Instituto Nacional de Colonización entre 1939 y 1974.
Por primera vez se ha catalogado el conjunto de más de 270 edificios para el culto construidos por el Instituto Nacional de Colonización (INC) entre 1939 y 1974 por toda la geografía española, gracias a la investigación que ha llevado a cabo Beatriz Caballero Zubia en la Escuela de Arquitectura de la Universidad de Navarra.
Este trabajo –que ha formado parte de su tesis en el programa de doctorado Historia y Análisis Crítico de la Arquitectura Española del siglo XX- se centra en el estudio de la arquitectura para el culto de los pueblos que levantó esta entidad en el ámbito agrario español.
El conocido como INC nació, al finalizar la Guerra Civil, "con el objetivo de proporcionar un hogar para los nuevos colonos. Aquellos pequeños propietarios estaban llamados a ser los productores en el engranaje del nuevo estado -que se había planteado sobre una economía autárquica basada en un nuevo sector agrario- y a constituir un factor clave de estabilización social”, explica la nueva doctora en Arquitectura.
De este modo, a lo largo de sus casi tres décadas de andadura el Instituto construyó casi 300 pueblos repartidos por todo el territorio nacional.
La investigadora ha viajado por muchos de ellos para conocer de primera mano las iglesias allí construidas: “He recorrido 51 pueblos repartidos por toda España. Muchos de ellos ya han sido analizados en otros estudios por regiones o a través de la obra de arquitectos concretos".
"En nuestro caso, nos centramos, por su relevancia, en los edificios de las iglesias. Estos han sido la pieza clave en el trazado urbano y en la propia vida en sociedad de estos poblados. También en Navarra, donde hay un grupo de poblados creados por el INC, especialmente en la zona del canal de las Bardenas Reales”, cuenta.
CONSTRUCTORES DE PAISAJES
Según detalla la autora de este trabajo, graduada en Arquitectura por la Universidad de Navarra (2010) y Master en Teoría e Historia de la Arquitectura (2011), “nuestro análisis profundizó en el estudio cronológico de estas iglesias y su relación con la arquitectura que figuraba en las revistas y publicaciones de la época”.
“Y, por otra parte”, añade, “también se estudia esta arquitectura desde tres enfoques: como hito -desde la escala paisajística-, como símbolo -desde la escala urbana, y como laboratorio -desde una aproximación experimental-”.
Por último, la nueva doctora en Arquitectura subraya que su tesis doctoral “pone el acento en el valor de las iglesias construidas por el Instituto Nacional de Colonización como conjunto, que a partir de ahora cuanta con un catálogo que recoge los ejemplos estudiados”.
