La Federación de Industria, Construcción y Agro de la UGT de Navarra ha denunciado ante la Inspección de trabajo que la empresa ZENER, dedicada al mantenimiento e instalación de comunicaciones para operadoras de telefonía, está despidiendo de forma improcedente a sus trabajadores en Navarra, alegando “bajo rendimiento”.
El sindicato denuncia que esta empresa está aprovechando las circunstancias excepcionales que vivimos a raíz de la crisis sanitaria provocada por el Coronavirus para deshacerse de sus trabajadores, privándoles así de la protección que les brindan las medidas extraordinarias en el ámbito laboral aprobadas por el Gobierno.
Concretamente, según ha tenido conocimiento UGT-FICA, desde que se decretó la alerta sanitaria, se han registrado unos 15 despidos improcedentes por parte de Zener. A todos los trabajadores despedidos se les ha comunicado el fin de su contrato a través de una carta en la que se justifica el despido por “bajo rendimiento”.
El sindicato ha denunciado el comportamiento de esta empresa ante las autoridades laborales competentes, por entender que está cometiendo un abuso, puesto que la ley en ningún caso permite el despido por “bajo rendimiento” debido a la alerta sanitaria.
Además, UGT-FICA ha denunciado ante la Inspección de Trabajo que esta empresa no ha dispuesto para sus trabajadores las medidas de prevención obligatorias para evitar contagios de Coronavirus. Los propios trabajadores han tenido que obtener de forma particular guantes y mascarillas desde la semana pasada, y sólo esta semana, gracias a la presión ejercida, han conseguido que la empresa reparta un par de guantes por cada instalador.
El sindicato ha puesto esta circunstancia en conocimiento de la Inspección de Trabajo para que actúe de acuerdo con las medidas excepcionales aprobadas por el Gobierno central durante el Estado de Alarma sanitaria en el que nos encontramos.
La Federación de Industria de la UGT de Navarra quiere advertir a las empresas que denunciará públicamente y ante la Inspección de Trabajo cualquier actuación que suponga un atropello hacia los trabajadores. En opinión del sindicato, el llamamiento a actuar contribuyendo al bien común no puede abarcar sólo a los ciudadanos, sino que también las empresas deben asumir su cuota de responsabilidad social en esta crisis, y no tratar de aprovecharse de la situación para despedir trabajadores y dejarlos desprotegidos.
UGT-FICA reconoce que la gran mayoría de las industrias de Navarra están teniendo un comportamiento responsable, y hace un llamamiento público a las empresas para que estén a la altura de las circunstancias. El sindicato reitera que denunciará cualquier atropello que se produzca y considera que las empresas que los cometan deberían quedar excluidas de cualquier ayuda pública.
