UGT ha reclamado que "esta ley debería establecer unos criterios de adjudicación que den un mayor valor a la relación calidad-precio".
El sindicato UGT ha considerado "imprescindible" que la nueva ley foral de Contratos Públicos incorpore "la obligatoriedad para todas las empresas adjudicatarias de cumplir con el convenio colectivo sectorial de aplicación a la actividad de que se trate".
En opinión del sindicato, "esta medida, junto a otras que propuso en noviembre a todos los grupos parlamentarios, excluiría de los procesos de subcontratación de servicios públicos a las empresas multiservicios que aplican convenios colectivos de empresa que esquivan los convenios sectoriales, para abaratar la mano de obra y eliminar los derechos laborales de los trabajadores".
En un comunicado, UGT ha defendido que "en la contratación pública el precio no puede ser lo único determinante, ya que, de lo contrario, la Administración Pública se convierte en un factor determinante de la precarización del mercado de trabajo".
A su juicio, "para evitar este efecto pernicioso, que se viene produciendo desde hace años, esta ley debería establecer unos criterios de adjudicación que den un mayor valor a la relación calidad-precio, teniendo en cuenta características sociales, propuestas técnicas o mejora de las condiciones de trabajo".
Para el sindicato, "la ley de Contratos no debe ser solo un marco legal que regule la actividad pública gestionada por iniciativa privada, sino también la herramienta que permita a la Administración velar por la calidad de los servicios que presta, incluidos los subcontratados, y por las condiciones laborales de quienes los prestan".
