Partidos políticos, sindicatos y asociaciones han exigido paralizar la nueva ley de policías y no dejar a la Benemérita afincada en Navarra en la estacada.
Lluvia de críticas ante el anuncio hecho por la presidenta del Gobierno de Navarra, Uxue Barkos, tras la reunión con el líder del Ejecutivo central, el socialista Pedro Sánchez, de que las competencias de tráfico y seguridad vial se iban a transferir en la Comunidad foral de la Guardia Civil a la Policía Foral.
Esta idea, que podría materializarse en el primer mes del próximo año, no ha calado bien entre algunos partidos políticos y asociaciones relacionadas con la Benemérita.
De hecho, la Asociación Pro Guardia Civil (APROGC) ha mostrado, a través de un comunicado, su "estupor e indignación" al confirmase los deseos de Barkos de "tratar a la Policía Nacional y a la Guardia Civil como cuerpos de segunda, subordinados a su Policía Foral" en lugar de implementar una estrategia de coordinación.
Así, han advertido de que "si continúan los episodios de descoordinación, acabarán produciéndose víctimas evitables".
Para esta asociación, el anuncio "representa un nuevo ataque a España y a su integridad territorial" ya que, señalan, Barkos pretende "la expulsión total y definitiva de la Guardia Civil de Navarra". Un cuerpo que cuenta aproximadamente con unos 1.600 agentes en territorio foral agrupados en 53 cuarteles y que, en general, "la población navarra manifiesta cotidianamente su aprecio al Cuerpo, salvo episodios puntuales como las agresiones de Alsasua".
También, la Asociación Española de Guardias Civiles (AEGC) ha expresado su "preocupación" por el futuro de los guardias civiles de la agrupación de tráfico en la Comunidad foral tras el acuerdo alcanzado entre el Gobierno navarro y el Ejecutivo central para la transferencia de la competencia de tráfico en exclusiva a la Policía Foral.
En opinión de AEGC, este acuerdo "tiene todo el aspecto de ser el pago político del gobierno socialista para lograr el apoyo parlamentario que necesitarán sus presupuestos". Y ha criticado que "una vez más estén utilizando como moneda de cambio a los guardias civiles y sus familias que serán en definitiva los que vean sus vidas cambiadas de la noche a la mañana".
"Muchos de estos agentes tienen vivienda propia, sus hijos han echado raíces en esta comunidad y ahora deberán dejarlo todo atrás y empezar de nuevo en otro lugar", ha lamentado la asociación en un comunicado.
Según ha indicado, ve con "preocupación" el acuerdo alcanzado entre ambos gobiernos porque "es el triunfo de esos pocos que siguen acosando e instigando a los guardias civiles y sus familias allí destinados" y ha considerado que el acuerdo es "el triunfo de esos pocos que llevan años gritando que la Guardia Civil se marche de Navarra".
"Si se lleva a cabo esta pérdida de competencias ellos podrán decir que han ganado. Por eso, no estamos de acuerdo con este pacto político, los guardias civiles de Navarra han luchado durante años contra el terrorismo, lo han sufrido, han dado su vida por proteger a los ciudadanos de su comunidad y ahora tendrán que abandonar sus casas, el entorno en el que han creado su familia, para que los cuatro abertzales acosadores sientan que han ganado ellos", han señalado desde AEGC.
En este sentido, han remarcado que "los integrantes de la Agrupación de Tráfico de la Comunidad foral son hombres y mujeres que han demostrado que saben realizar bien su cometido y que cuando se les ha necesitado han estado ahí los primeros".
UGT PIDE QUE SE PARALICE LA LEY FORAL DE POLICÍAS
La Federación de Servicios Públicos de UGT ha pedido este jueves que se paralice la tramitación de la nueva ley foral de Policías de Navarra ya que la misma se verá afectada por el traspaso de las competencias de tráfico y seguridad vial.
Asumir en "exclusiva" estas competencias, dice en un comunicado Sergio Uría, secretario de administración local de FeSP-UGT, "viene a dar en las narices a los que tienen una prisa enorme por aprobar una nueva ley de policías y en medio de su vorágine legisladora de repente se encuentran con que en unos meses pueden necesitar un nuevo cambio normativo para adaptarse a las nuevas circunstancias".
Una situación que se produce "cuando se tiene mucha prisa en hacer algo y preocupa más que esté hecho a cuál sea el resultado" y en ese caso, añade, "ha habido tanta prisa por modificar una ley aprobada hace tan sólo tres años que ahora se van a encontrar con que en unos meses es más que probable que haya que volver a modificarla para adaptarla a la nueva realidad policial en Navarra", señala.
Uría se pregunta también por el futuro de los guardias civiles de tráfico que han prestado servicio de "manera ejemplar", unos "navarros de nacimiento" y otros "vecinos desde hace muchísimos años, con hijos navarros y algunos con nietos navarros", y que ahora se pueden ver "prácticamente desterrados si no se les da una solución".
Por todo ello apunta que la nueva ley "se está quedando obsoleta antes de ser aprobada" porque "se está legislado sin haber establecido antes el modelo policial" y al alterarse el modelo actual "la ley se queda pequeña y no da solución al problema".
CIUDADANOS: "EN NAVARRA CABEN TODAS LAS POLICÍAS"
El portavoz de Ciudadanos Navarra, Carlos Pérez-Nievas, ha afirmado esta mañana en relación al acuerdo por el que la Policía Foral pasaría a asumir definitivamente las competencias de tráfico y seguridad vial que “ésta es perfectamente competente para llevar a cabo la tarea, pero le va a ser imposible con una consejera que, si no sabe organizar el cuerpo tal cual está, menos va a hacerlo con más competencias, más gasto y más unidades”.
El Portavoz de Ciudadanos Navarra ha añadido que “en ningún caso debe suponer este acuerdo la salida de la Guardia Civil de Navarra, ya que es un momento perfecto para delimitar competencias de manera transparente y organizada, y aprovechar los recursos y especialidades de cada cuerpo. Para Ciudadanos, en Navarra caben todas las policías”.
APF PONE VE LO "POSITIVO" DEL ACUERDO
Por su parte, el sindicato de APF ha considerado que es positivo el acuerdo alcanzado por el Gobierno de España y el de Navarra. "Este sindicato no alberga duda alguna sobre la cualificación profesional y organizativa de la Policía Foral para asumir esta responsabilidad", señalan en un comunicado.
"La ley de Policías de Navarra que se está tramitando en el Parlamento resultará pieza fundamental para afrontar este futuro inmediato", concluyen.
