El presidente de UAGN, Félix Bariáin, ha expresado la "satisfacción" del sindicato agrario por la construcción de la segunda fase del Canal de Navarra, "una reivindicación histórica de la organización".
"Llevamos casi 10 años denunciando de forma incansable la paralización de la segunda fase del Canal de Navarra y para nosotros es un acontecimiento muy significativo. Se trata de un proyecto fundamental para el sector agroalimentario que llevamos mucho tiempo esperando y también muy importante para el uso de agua de boca", ha destacado.
Asimismo, según ha expuesto Bariáin en un comunicado, la segunda fase "fomentará el equilibrio territorial y el desarrollo económico en la Ribera". Y ha destacado que "esta construcción supondrá un estímulo para que los jóvenes se instalen en el sector agrario y se fomente el empleo y el rejuvenecimiento del sector, tan prioritario en estos momentos".
Según ha precisado, la segunda fase del Canal de Navarra conlleva la construcción de una infraestructura de transporte de unos 70 kilómetros de longitud, que permitirá el abastecimiento de agua de boca de calidad a más de 70.000 habitantes de la Ribera y posibilitará la puesta en riego de hasta 21.522 hectáreas.
Ha recordado que el estudio de alternativas para el proyecto de la segunda fase del Canal de Navarra, encargado por Canasa y realizado por la UTE Ingiopsia-Eptisa, planteaba diferentes opciones para llevar el agua a la Ribera.
Y ha remarcado que "una vez analizados aspectos como el impacto sobre el medio y el territorio, la viabilidad socioeconómica o la viabilidad técnica, se considera como mejor opción la de dos tuberías sin decalaje, priorizándose de este modo la rentabilidad social y estratégica del proyecto".
Para Bariáin, "esta solución presenta destacadas ventajas frente a la otra opción contemplada (dos tuberías con decalaje)". En primer lugar, según ha expuesto, "conlleva un desarrollo más rápido de toda la zona regable de la segunda fase, al posibilitar, desde un inicio, la puesta en riego de hasta 21.522 hectáreas".
Asimismo, ha agregado, "permite realizar una planificación estratégica en el ámbito agrícola, industrial y de suministro urbano". "Consideramos que la modalidad elegida de las dos tuberías es la más razonable porque generará menor impacto ambiental y se resolverá en una sola actuación y no conllevará, por tanto, posibles imprevistos o retrasos", ha apuntado Bariáin.
En su opinión, "esta obra va a permitir la implantación de nuevos cultivos, fijación de la población y generación de empleo" y ha considerado que "el acuerdo de ayer va a ser una de las patas en las que se sustente la salida de esta crisis". Para ello, ha remarcado, "tenemos que ser capaces de cumplir los plazos y conseguir objetivos".
