Se espera que, a partir del lunes, los mercurios empiecen a subir hasta llegar al día del Chupinazo, que lucirá radiante en Pamplona.
Todas sus caras. Eso es lo que está mostrando el tiempo en Navarra en las últimas semanas, hecho al que hay que adaptarse desde hace unos 10 días, donde los mercurios 'bailan' entre temperaturas tan dispares que van del más puro estilo otoñal a 'olas de calor' también poco típicas de junio.
Si hace exactamente una semana, Navarra pasaba el viernes a temperaturas que rondaban los 25 grados, este 30 de junio se cerrará el mes con cifras de 18 grados en la Comunidad foral. Estas, se irán manteniendo durante este sábado y domingo en el que se puede interpretar como un tiempo de respiro, además de una previa para las fiestas de San Fermín, que arrancan el jueves.
Un adelanto de la previsión meteorológica advierte ya de que los mercurios marcarán entonces las mismas máximas de hace una semana en Pamplona. Como tal, se espera que el día del Chupinazo luzca radiante en la capital navarra y que llegue a máximas de 30 grados, tal y como prevé la Agencia Estatal de Meteorología.
Entre sus datos todavía no se advierte de qué temperatura seguirá los días siguientes al inicio de las fiestas, si bien otras páginas webs y medidores del tiempo como Eltiempo.es avanzan que las fiestas se mantendrán con temperaturas estables y que irán en un aumento progresivo desde el día 6 hasta el 14.
Aunque todavía la fiabilidad del tiempo para los Sanfermines no se puede catalogar de exacta, bien parece que julio arrancará este sábado con termómetros fríos para el mes que toca. La máxima en Pamplona será de 16 grados.
Aún así, a partir de este mismo lunes los termómetros irán incrementando su apuesta por el verano y será significativo el cambio de temperaturas que se vivirá de este domingo 2 de julio al lunes 3 de julio.
Por otro lado, se prevé para este viernes en Navarra un día nuboso o cubierto cubierto con precipitaciones, ocasionalmente en forma de chubascos tormentosos, más frecuentes e intensos en la mitad norte. Las lluvias y chubascos serán persistentes en la Vertiente Cantábrica y poco probables en La Ribera Baja, mientras que las máximas descenderán en el tercio sur.
