• jueves, 18 de abril de 2024
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SOLIDARIDAD

Solidaridad que ilumina vidas: emoción en la Gala de las Estrellas de Alcer Navarra en Pamplona

Han sido galardonados donantes de riñón en vida, el Dr. Jesús Arteaga, la Coordinación Hospitalaria de trasplantes y ocho socios con 25 años de trayectoria en Alcer.

Dos donantes de riñón en vida, María José Casanova y Martín Ancízar, el Dr. Jesús Arteaga, la Coordinación Hospitalaria de trasplantes y 8 socios con 25 años de trayectoria han sido reconocidos este jueves por la asociación Alcer Navarra en la II Gala de las Estrellas por la donación en vida, que tenía como objetivo “mostrar esas estrellas poco frecuentes en nuestra sociedad que brillan al son de la solidaridad”. Celebrada en el Museo Universidad de Navarra, ha cerrado los actos de celebración del Día Europeo de la donación de órganos en la Comunidad foral por parte de la asociación.

“Esta gala es la celebración de las segundas oportunidades, que llegan gracias al gesto de solidaridad de las personas que han donado un órgano en vida y del trabajo coordinado de los profesionales de trabajo coordinado de profesionales, instituciones y asociaciones de pacientes”, ha explicado Manuel Arellano, presidente de Alcer Navarra, Asociación para la Lucha Contra las Enfermedades Renales.

Arellano ha adelantado que Navarra continuará este año entre las tres primeras autonomías tanto en trasplantes como en donación de órganos. “Este año esperamos superar las cifras del año pasado en donación y trasplantes en Navarra, lo que muestra un continuo ascenso desde que en 2012 se registraron las cifras más bajas en la Comunidad foral. Esto muestra que el riego por goteo en sensibilización está calando ya que se mantienen las donaciones y se reducen las negativas familiares. Ahora la apuesta es lograr que la sociedad navarra se empape de la cultura de la donación en vida”

En este sentido, ha recordado que la edad media de los donantes fallecidos supera los 60 años lo que “reduce las posibilidades de las personas de 30 o 40 años para acceder a un trasplante”, por lo que “la solución pasa necesariamente por la donación en vida”

Arellano ha concluido su intervención agradeciendo “a las verdaderas estrellas de la gala, Martín y Maria José, que son los altavoces de todas esas personas que han hecho del arte de dar la obra de su vida, dando una parte de sí mismos, un riñón, para salvar la vida de otra persona”.

DONAR VIDA

El presidente de Alcer ha dado paso al primer reconocimiento de la gala, en este caso por su trayectoria profesional, al doctor Enrique Moreno, premio Príncipe de Asturias de Investigación Científica y Técnica, quien relató las distintas formas de donación en vida de diferentes órganos y apostó por la donación en vida “como la técnica que da más calidad de vida al receptor y más longevidad al injerto” A continuación, 8 socios con 25 años de trayectoria en la asociación recogieron el reconocimiento Estrella Vega, premio “Vega”, una estrella que está exactamente a 25 años luz.

Asimismo, se han entregado los reconocimientos Estrella Ofiuco a un profesional, el Dr. Arteaga, jefe de nefrología del Complejo Hospitalario de Navarra, y Estrella Antares a una institución, la coordinación Hospitalaria de trasplantes, recogido por la enfermera Monserrat Lorente, “por su trabajo en la mejora de la atención y la calidad de vida de los enfermos renales”.

“El Jurado, compuesto por profesionales de la enfermería, la medicina y miembros de Alcer, ha decidido de forma unánime otorgar el reconocimiento Estrella Ofiuco al doctor Arteaga por su impulso y promoción de las técnicas domiciliarias, por su implicación en la creación de una red nefrológica en Navarra abriendo colaboración entre hospitales y su sensibilidad docente.

Y de la misma manera, ha reconocido con el premio Estrella Antares a coordinación Hospitalaria de trasplantes, por la adaptación a las necesidades de los tiempos, por la delicadeza y profesionalidad de sus integrantes, por su disposición a facilitar el trabajo en cada operativo de donación multiorgánica entre la ONT, CUN y CHNA”.

El Dr. Arteaga, por su parte, ha agradecido el reconocimiento “pero no a título individual sino como un tributo al conjunto de profesionales que trata a los pacientes renales a lo largo de su proceso vital,  que a veces culmina con un trasplante y otras por desgracia no”. Arteaga ha reivindicado “la relación médico-paciente” como clave en la enfermedad renal y ha destacado que “aunque la ciencia deje obsoletos los tratamientos de hoy no debemos consentir que los avances terminen con la humanidad de los profesionales Al final unos y otros formamos una gran familia”

"UN GRAN EQUIPO"

Por su parte, la Monserrat Lorente, que acudió a la gala como representante de la Coordinación hospitalaria de trasplantes, agradeció el trabajo conjunto del Complejo Hospitalario y de la Clínica Universidad de Navarra, quienes forman “un gran equipo”. “Los Coordinadores del Complejo Hospitalario de Navarra detectan los donantes de la Comunidad y las Coordinadoras de la Clínica Universidad de Navarra realizan los trasplantes. Unos y otros formamos un equipo y muy a menudo repetimos lo mismo: el proceso de donación y trasplante se lleva a cabo gracias al trabajo y a la colaboración entre los profesionales de ambos Centros”.

Coordinadora de trasplantes desde 2004, ha destacado algunos de los momentos de su trabajo “más emocionantes, como cuando llamo al receptor para comunicarle que hay posibilidad de un órgano” y “más tristes, como cuando hablas con la familia y les dices que su ser querido ha fallecido”. “Puedo recibir una llamada de la ONT de día o de noche y siempre tengo que estar alerta: paso de estar en reposo a ponerme a 100 km por hora en un momento, porque es un trabajo que requiere mucha concentración y rapidez para que todo salga bien”.

Por último, Alcer Navarra entregó el premio Constelación Alcor y Mizar a dos donantes en vida del presente año. Martín Ancízar, de 53 años y vecino de Lesaka, donó un riñón a su hermana Esperanza el 7 de marzo sin ni siquiera entrar en diálisis. También se premió a María José Casanova, vecina de Barañáin y de 52 años, quien destacó en su discurso el duro proceso desde que su marido, Jesús Alquaz, entró en diálisis en marzo, hasta que llegó el “feliz” momento del trasplante cuatro meses después.

La Gala contó además con la actuación del coro juvenil de cámara del Ayuntamiento de Pamplona y con la proyección de distintos videos, tanto del 40 aniversario de Alcer como del proceso de trasplante y de la leyenda japonesa del hilo rojo según la cual desde que nacemos tenemos una hilo atado al meñique que nos conecta a otra persona que nos puede ayudar y con la que estamos conectados sin saberlo, haciendo alegoría de la conexión de los donantes en vida. La gala contaba con el patrocinio y la colaboración de Federación Nacional Alcer, Ayuntamiento de Pamplona, Fundación CAN, Obra social la Caixa, COCEMFE Navarra, Museo Universidad de Navarra, Gobierno de Navarra, CINFA, Lacturale, Navarra.com, GSE Software, y Bodegas Olimpia.


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