El sindicato CCOO de Industria ha mostrado este jueves su preocupación por el impacto que puedan tener en la plantilla los malos resultados que el fabricante de aerogeneradores Siemens Gamesa presentó el miércoles a los mercados.
Siemens Gamesa informó este miércoles de que en su primer semestre fiscal (octubre-marzo) tuvo unas pérdidas de 339,3 millones de euros, frente a los 67 millones que ganó un año antes, con un impacto directo de la crisis del COVID-19 de 56 millones sólo en el segundo trimestre.
En un comunicado, CCOO ha dicho que ya temía que los resultados trimestrales de Siemens Gamesa serían malos, y ha señalado que a las pérdidas conocidas hay que sumar que la compañía ha comprado la planta de Senvion en Portugal, lo que, a juicio del sindicato, supone "una amenaza real de deslocalización para quiénes fabricaban palas en España".
CCOO ha pedido a Siemens Gamesa que se comprometa con su plantilla, integrada por unos 5.000 trabajadores, y que facilite reuniones con los sindicatos, con las áreas financieras y con Recursos Humanos para explicar y analizar los resultados de forma trimestral.
ARCELORMITTAL CONCLUYE LA NEGOCIACIÓN DEL ERTE SIN ACUERDO
La dirección de ArcelorMittal ha dado este jueves por concluidas las negociaciones para la aplicación de un Expediente de Regulación Temporal de Empleo (ERTE) por causas objetivas para los 8.000 empleados de España, 5.400 de ellos en Asturias, tras no haber a alcanzado un acuerdo con los sindicatos.
Tras varias horas de reunión y ante la imposibilidad de cerrar un acuerdo que satisfaga a ambas partas, la mesa negociadora se ha levantado entre críticas de las centrales sindicales.
Los sindicatos sostienen que la empresa se mantuvo en sus argumentos centrados en la obtención de los ahorros que preveía obtener con el ERTE de fuerza mayor, que fue rechazado por la autoridad laboral.
Los sindicatos UGT, CCOO y USO propusieron aplicar un complemento escalonado del 90 al 80 por ciento, que se modularía en función de los días de aplicación del expediente, pagas extras y vacaciones al cien por cien, y la inclusión de medidas de acompañamiento como la garantía del mantenimiento del empleo y de la actividad industrial.
La última propuesta de la dirección de la empresa, según los sindicatos, consiste en un complemento de hasta el 75 por ciento del salario bruto sin la prima de producción, pagas extras al 75 por ciento, y no se generarían vacaciones en el periodo del ERTE, que tendría una vigencia hasta el próximo 31 de diciembre.
Para los sindicatos, esa propuesta supone una reducción salarial de aproximadamente el 40 por ciento del salario bruto anual.
UGT ha rechazado esta propuesta por considerarla “una auténtica tomadura de pelo” hacia los trabajadores y ha anunciado que tomará las medidas legales y sindicales que estime oportunas.
Por su parte, CCOO también ha mostrado su disposición a adoptar las medidas legales y sindicales que correspondan, en coordinación con el resto de fuerzas sindicales.
