La nueva Escuela del Opositor de la Universidad de Navarra ha puesto en marcha este curso 2019-2020 un itinerario formativo dirigido a los alumnos interesados en opositar, aunque las circunstancias del confinamiento han llevado a realizar los simulacros de forma virtual.
La profesora y vicedecana de la Facultad de Derecho de la Universidad de Navarra, Asunción de la Iglesia, ha explicado en un comunicado que "son bastantes los estudiantes que se plantean esta posibilidad al terminar la carrera".
Las asignaturas que forman parte del programa se distribuyen a lo largo de la carrera y sirven como introducción para los alumnos al mundo de las oposiciones, una iniciativa que, a juicio del vocal del Consejo General del Poder Judicial y profesor de la Escuela, Juan Manuel Fernández, "beneficia" a los alumnos.
En esa misma línea, Fernández ha aseverado que los contenidos ayudan a los estudiantes "si realmente quieren opositar o no" con un programa que incluye "técnicas de estudio y memorización, mecanismos para lidiar con el estrés, o habilidades discursivas para el cante de temas", entre otros.
Además, estudian temarios específicos de oposición y, una vez finalizada la parte teórica, deben enfrentarse a un examen a modo de simulacro de oposición donde deben defender dos temas al azar delante de un tribunal.
Ni siquiera el confinamiento ha sido capaz de impedir que esa defensa sucediese, aunque, eso sí, de forma virtual y frente a un tribunal compuesto por el presidente del Tribunal Superior de Justicia de Navarra, Joaquín Galve, junto a Fernández y De la Iglesia.
Esto supuso una "presión añadida" para los estudiantes de tercer y cuarto curso de derecho como Teresa Portillo, a la que "el buen funcionamiento de la plataforma y la ausencia de fallos técnicos le ayudó a no perder la concentración mientras cantaba los temas", aunque ha reconocido que la modalidad virtual tiene dificultades.
"Me ha resultado más costoso hablar mirando a un ordenador porque en ocasiones no sabes realmente a donde miras, pero, dadas las circunstancias, el método ha sido muy bueno", ha añadido Portillo, una opinión que comparte el también alumno Carlos Lucas, que ha calificado la situación de "peculiar".
También ha sido una experiencia nueva para los miembros del tribunal, que han reconocido el esfuerzo de los estudiantes "no solo para realizar el examen, sino para estudiar y mantener la concentración durante estas semanas tan tristes".
A pesar de las circunstancias, este primer curso de la Escuela del Opositor ha resultado un "éxito" tanto para profesores como para alumnos, a los que les ha esclarecido dudas y les ha abierto "el abanico de salidas profesionales".
