El departamento de Salud del Gobierno de Navarra se ha propuesto sacar a licitación en el segundo semestre de 2020 el acuerdo marco para la prestación de rehabilitación domiciliaria a cargo del Servicio Navarro de Salud, "dirigido a todas las personas cuya asistencia sanitaria corresponde al propio SNS".
Así lo ha expuesto en comisión parlamentaria la consejera de Salud, Santos Induráin, quien ha precisado que la asistencia será de duración limitada en el tiempo y "dirigida a la consecución de objetivos funcionales medibles mediante escalas de valoración funcional en la que tomen un papel activo las personas a las que va dirigida". La prescripción será, ha dicho, competencia del médico rehabilitador.
Ha explicado la consejera que, en base a la experiencia de otras Comunidades que ya han implantado la rehabilitación domiciliaria, se estima que "inicialmente precisa esta modalidad asistencial un 0,5 por ciento de la población mayor de 65 años y un 0,026 por ciento de las personas menores de esa edad". "Probablemente estas necesidades se irán incrementando con el tiempo tras la implantación del servicio, alcanzando cifras más próximas al 1 por ciento en la población mayor de 65 años cuando esta modalidad ya esté consolidada", ha dicho.
Induráin ha manifestado que en Navarra se plantean dar inicio a este programa atendiendo a las personas con problemas osteomusculares (fracturas de cadera, artoplastias de cadera y rodilla y síndrome de inmovilidad) o que hayan sufrido un ictus.
Por otro lado, la consejera se ha referido al proyecto de camas de convalecencia residencial y ha señalado que en 2015 se pilotó en el área de Tafalla una experiencia de carácter residencial dirigida a personas que había sufrido un déficit funcional por ictus o fractura de cadera, "experiencia que tuvo corta duración en el tiempo y número limitado de casos atendidos".
Ha añadido que el proyecto de atención integrada sociosanitaria que se viene trabajando en la Comunidad foral desde 2016 "prevé la dotación de recursos temporales que respondan a la ley, generando estos recursos en el entorno más cercano a las personas usuarias". Esta nueva forma de trabajo interdepartamental, ha comentado, se ha implantado en el marco del distrito de Tafalla.
Salud y Derechos Sociales, ha explicado, consensuaron en 2018 la creación del ECoDISS, equipo de coordinación de distrito sociosanitario con el objetivo de "impulsar, coordinar y garantizar una atención sociosanitaria integrada, adecuada y de calidad".
La consejera ha explicado que Servicios Sociales ha sacado a concurso recientemente un proyecto de atención residencial sociosanitaria que prevé que la estancia tendrá como duración máxima un mes, "excepto circunstancias excepcionales que recomienden su prórroga".
El número de plazas necesarias en el distrito de Tafalla para la prestación de este servicio se ha calculado, ha dicho, teniendo en cuenta la experiencia piloto anterior, el número de casos con los diagnósticos referidos atendidos en dicho área y la experiencia del pilotaje en los últimos meses prestando los servicios de atención residencial. Se ha estimado en un total de tres camas.
Induráin ha detallado que el servicio de atención residencial se presta en un establecimiento residencial, con el fin de "ofrecer atención integral a las necesidades básicas, sanitarias y sociales, con especial hincapié en la rehabilitación funcional de las personas y en la preparación para la vuelta al domicilio o la derivación a otro soporte de carácter residencial".
La consejera ha indicado que con las actuaciones que se lleven a cabo en 2020 se procederá a una nueva evaluación y toma de decisiones para la concertación de las plazas necesarias para esta prestación dirigidas de modo progresivo a la totalidad de los ciudadanos navarros.
