En total, la Asociación Chernóbil Elkartea ha logrado traer este verano a 192 menores ucranianos, 15 de ellos acogidos en Navarra.
Representantes de la Asociación Chernóbil Elkartea, con buena parte de las familias acogedoras y de los menores ucranianos que gracias a ellas pasan este verano en Navarra y País Vasco, han sido recibidos este lunes en el Ayuntamiento de Pamplona, donde el alcalde ha deseado que su experiencia "ayude a construir una sociedad mejor".
La Asociación Chernóbil Elkartea ha logrado traer este verano a 192 menores ucranianos, 15 de ellos acogidos por familias navarras, quien es en estos meses procuran cuidados médicos y alimentarios, además de organizar otras actividades culturales y de ocio, a estos menores nacidos en la zona del desastre nuclear de Chernobil.
A la recepción han asistido 17 familias de acogida, las 15 de Navarra y 2 procedentes de Guipúzcoa, además de monitoras ucranianas que realizan un seguimiento de su estancia y personas voluntarias que colaboran con la asociación.
En total, han sido 33 niños y niñas y 40 personas adultas que durante dos meses comparten todo en pro de unos menores que acarrean en sus vidas las consecuencias del accidente nuclear de 1986. Los niños y niñas ucranianos llegaron el pasado 2 de julio y volverán a su país el próximo 28 de agosto.
A lo largo de la estancia, además de la convivencia con las familias de acogida, que es el aspecto fundamental del programa, la asociación organiza diversas actividades de ocio para que los menores también puedan reunirse, disfrutar juntos y contarse sus experiencias.
Además del alcalde, que también ha tenido palabras de gratitud para las familias de acogida como "los mejores embajadores de la solidaridad", ha intervenido en el acto la voluntaria y miembro de la junta directiva de la Asociación Chernóbil Elkartea, Nerea Albisu, quien ha subrayado que mejorar su salud y aportarles fuerza es "el objetivo principal de su asociación", ha dicho tras animar a las familias navarras a su actividad.
También ha intervenido la niña de 11 años, Vitalina Rudenko, que lleva ya ha pasado tres veranos en Navarra disfrutando de su familia de acogida entre Pamplona y la localidad de Úcar, y quien ha reconocido que lo que más le gusta es "ir a la piscina y andar en bici".
La Asociación Chernóbil Elkartea tiene como objetivo fundamental proporcionar ayuda humanitaria a los menores víctimas del desastre nuclear de Chernóbil y demás catástrofes producidas por medios naturales o intervención. Para conseguir este fin, llevan a cabo acciones como programas de acogimiento temporal y familiar y programas de cooperación al desarrollo.
Para el año que viene, la asociación pretende aumentar el número de familias de acogida en Navarra, donde en los últimos años ha colaborado con la asociación navarra Arco Íris Solidario, que también acoge temporalmente a menores de Ucrania, de familias con necesidades o procedentes de orfanatos.
