El doctor Jesús San Miguel, director de Medicina Clínica y Traslacional de la Universidad de Navarra, ha recibido el Premio Jan Gosta Waldenström por su contribución a la mejora del diagnóstico de la macroglobulinemia de Waldenström, un cáncer hematológico poco frecuente y que ha sido, junto al mieloma múltiple, objeto principal del interés profesional de este especialista de la Clínica Universidad de Navarra.
No es el primer premio que recibe este investigador de la Clínica. En 2015 recibió un premio internacional de investigación hematológica, es además uno de los científicos más citados de España, y este mismo año ha recogido el Premio Nacional de Investigación.
La Fundación Internacional de Waldenström ha reconocido al doctor San Miguel “por una larga trayectoria de contribuciones y logros para mejorar la vida de los pacientes de macroglobulinemia de Waldenström”.
Esta enfermedad –como indica el propio premiado-, “está a caballo entre los linfomas y el mieloma múltiple. Se diferencia del mieloma en que no provoca lesiones en los huesos, y rara vez insuficiencia renal. En cambio, tiene en común con los linfomas el posible aumento de los ganglios linfáticos y del bazo”. El doctor San Miguel añade que el nombre de macroglobulinemia lo recibe porque la proteína que producen las células tumorales -linfoplasmocitos- en la sangre es de gran tamaño. Se trata de una inmunoglobulina IgM, de estructura pentámerica, que hace que la sangre pueda volverse muy viscosa ocasionando el denominado síndrome de hiperviscosidad”.
En España se diagnostican unos 150 casos nuevos de macroglobulinemia de Waldenström al año y la edad media de los pacientes es de 70 años, presentándose con más frecuencia en hombres que en mujeres.
El doctor San Miguel, director médico de la Clínica y director científico del Cima Universidad de Navarra, se ha ocupado de la investigación y tratamiento de esta enfermedad a lo largo de su carrera profesional y sus aportaciones más relevantes se centran en la descripción de su origen fenotípico y genético.
“Sabemos que los enfermos presentan una anomalía genética específica y singular, que es una mutación en el gen MyD88, y el conocimiento de esa mutación ha contribuido al descubrimiento de nuevas estrategias terapéuticas. Todos los pacientes de macroglobulinemia de Waldenström tienen excelentes opciones de tratamiento y, para muchos de ellos, su esperanza de vida es similar a la del resto de la población”, explica el Dr. San Miguel.
El médico sueco Jan Gosta Waldenström (1906-1996) fue un especialista que descubrió y nombró nueve enfermedades, entre las que, además de la macroglobulinemia que lleva su apellido, se encuentran la porfiria, las gammapatías monoclonales y policlonales o el síndrome carcinoide.
El Dr. San Miguel indica que el doctor Waldenström “fue un referente médico mundial” y subraya que “conjugó docencia, investigación y asistencia, y es llamativo que situaba en primer lugar la docencia. Waldenström hablaba de enseñar, investigar y cuidar a los pacientes mientras vamos aprendiendo la ciencia y el arte de la Medicina”.
Además del Premio Waldenström, el doctor San Miguel ha recibido recientemente el reconocimiento como Socio Honorario de la Sociedad Chilena de Hematología por su contribución a la formación de los especialistas de este país, con los que colabora habitualmente.
