Se trata de una campaña que organiza Konteseilua con apoyo del Gobierno de Barkos y que usa ejemplos sacados de contexto para tratar de imponer el euskera en toda la Comunidad foral.
Desde hace varias semanas, algunos buzones de Navarra se han llenado con masiva propaganda referida al euskera.
En concreto, se trata de una campaña publicitaria desarrollada por el denominado Consejo de los Organismos Sociales del Euskera, Kontseilua, que busca apoyos para convertir a la lengua vasca en el idioma oficial de toda Navarra y que, al parecer, cuenta con el apoyo del propio Gobierno de Navarra.
De esta manera, se han distribuido miles de dípticos que bajo el título 'Pide la oficialidad, para lograr la igualdad', explican de manera sesgada el supuesto incumplimiento de la denominada ley del Euskera y su zonificación en la Comunidad foral y aseguran que los euskaldunes tienen en Navarra "grandes dificultades" para vivir en euskera.
Así, el panfleto usa algunos ejemplos sacados de contexto para pedir firmas y que los diferentes ayuntamientos forales establezcan la lengua vasca como el idioma oficial del municipio "a todos los efectos".
Del mismo modo, se pide que los consistorios trasladen la petición al Parlamento y al Gobierno de Navarra "para que deroguen la zonificación lingüística" y el euskera sea el idioma oficial en lugares como Tudela.
"No hay oferta en euskera en la escuela infantil"; "en la piscina pública no saben euskera" o "mi hija no tiene pediatra euskaldun".
Son algunos de esos ejemplos que la campaña de publicidad pone sobre la mesa para argumentar que el euskera no tiene la 'presencia' necesaria en Navarra, a pesar de los esfuerzos del Gobierno de Barkos por auparlo a lo más alto, incluso por encima de otros idiomas más internacionales y con más uso como el inglés.
Sin embargo, los ejemplos que propone esta propaganda a modo de queja en Navarra dan un paso más allá con otras consignas que 'obligarían' a una empresa privada a usar el euskera. Así, Kontseilua pone como modelo que "la megafonía del centro comercial da los mensajes sólo en castellano".
Respecto a la llamada zonificación, el organismo que defiende el euskera sostiene que en la zona mixta no se dan las "garantías" necesarias para garantizar los derechos lingüísticos de las personas que allí viven.
"La ciudadanía tiene permiso para utilizar el euskera en sus relaciones con la Administración, pero sus instituciones no están obligadas a tratarles en euskera", señala el panfleto.
Además, también hablan de "discriminación", ya que consideran que todos los navarros "no tienen la misma libertad de opción lingüística" y tildan de "injusticia" la zonificación de un idioma que, por ejemplo, en la Ribera de Navarra es casi residual.
No obstante, la publicidad pide que se rellenen los datos personales y señalen las "dificultades" que tienen los euskaldunes para vivir en euskera y se entregue en diferentes comercios o lugares de titularidad pública como colegios o casas de cultura distribuidas en Ansoáin, Berriozar, Burlada, Mutilva, Sarriguren o Pamplona.
Se trata de una campaña que, según se puede ver en su propia web, cuenta con el apoyo del Gobierno que dirige Uxue Barkos.
