El Olentzero de la localidad navarra de Huarte ha llegado con polémica después de que el frontón en el que se celebraba este tradicional acto de la Navidad, y que contaba con decenas de niños, se encontrara 'forrado' con banderas del País Vasco, esteladas catalanas y enseñas forales 'amputadas' sin cadenas ni esmeraldas.
Asimismo, también se pudieron ver emblemas que hacían referencia al acercamiento de los miembros de la banda terrorista ETA que cumplen condenas en diferentes cárceles de España alejadas de sus lugares de residencia.
En el mismo recinto, decenas de niños y niñas se daban cita para asistir a la llegada del 'carbonero' más famoso frente al estupor de padres y madres que allí se encontraban acompañando a los más pequeños.
La localidad de Huarte se encuentra gobernada por los radicales de EH Bildu (Alfredo Arruiz) con el consentimiento del Partido Socialista de Navarra después de una 'rocambolesca' sesión plenaria en la que los socialistas se ausentaron para entregar la presidencia a los radicales como contrapartida por haber permitido que la actual presidenta, María Chivite, accediera al Palacio de Navarra.
Por su parte, Geroa Bai Huarte ha considerado un "error" exhibir "reivindicaciones políticas" en actos como el desfile de Olentzero, ya que "ésta es una tradición cultural que es de todos y todas y, por lo tanto, están fuera de lugar en eventos como éste, dirigido especialmente a niños y niñas".
En un comunicado, la coalición ha agradecido "el esfuerzo de todo el voluntariado que, año tras año, prepara y organiza el desfile de Olentzero en nuestro pueblo, haciéndolo posible".
No obstante, ha considerado que "el espíritu de este tipo de actos debe ser transversal" y, por ello, ha pedido "una reflexión a la entidad privada que lo organiza para evitar reivindicaciones que no nos cohesionan como pueblo y del que buena parte del mismo se sienten excluidos".
