Los organizadores "han visto que no se dan las condiciones para celebrar su fiesta este año y la han aplazado al siguiente".
Las ikastolas mantienen la "determinación" de celebrar cuatro de sus fiestas previstas en otoño, pero no así el Nafarroa Oinez, que ha sido aplazado al año siguiente.
El 18 de octubre estaba previsto llevar a cabo el Nafarroa Oinez en Estella, pero los organizadores y la ikastola Lizarra "han visto que no se dan las condiciones para celebrar su fiesta este año y la han aplazado al siguiente".
"Es un duro golpe para las ikastolas navarras y especialmente para la ikastola Lizarra, pero como hemos hecho hasta ahora, gracias a iniciativas solidarias, saldremos también de esta tesitura", han afirmado en un comunicado difundido por Ikastolen Elkartea.
En él apuntan que las ikastolas mantienen la "determinación" de celebrar sus fiestas en otoño, pues entienden que entonces la situación de la pandemia lo permitirá y además no se "resignan" a suspender unos eventos que "no son meras fiestas".
Explican que, "a medida que se acerquen las fechas", verán si pueden organizar las distintas fiestas en cada territorio o deberán finalmente cancelarlas, pero recalca que "hoy por hoy" su decisión es celebrarlas.
"Alguien nos dirá si estamos locos, que en los tiempos que vivimos no es posible reunir a grandes grupos de personas. En la situación actual, por supuesto, así es. Pero miramos al otoño, a un escenario diferente, y en este momento vemos que sí puede ser factible", precisa.
Las fechas fijadas son: el 20 de septiembre para el Herri Urrats en Senpere; el 4 de octubre, como ya estaba previsto, el Kilometroak en Amasa-Villabona y Zizurkil; y el 18 de octubre el Araba Euskaraz y el Ibilaldia en Amurrio y Elorrio, respectivamente.
Ikastolen Elkartea asegura que, en esos cuatro eventos, actuará "con responsabilidad" y "con todas las condiciones para garantizar la salud" mediante " formatos adaptados, ofreciendo comida y bebida en condiciones seguras, profundizando en las medidas de higiene".
Insiste en que no se quieren "resignar" porque estas reuniones festivas "tienen otros objetivos importantes", como "estrechar lazos entre los miembros de cada ikastola", ofrecer "un gran altavoz al euskera" y "cinco plaza a la cultura vasca", y "obtener financiación" para otros proyectos.
"En estos momentos tenemos presentes a todos los artistas que se comprometieron a participar en nuestras fiestas, a todos los responsables de la infraestructura, a nuestros patrocinadores y colaboradores. El trabajo realizado conjuntamente, el compromiso y la adhesión que han mostrado hacia nosotros, nos obliga y nos impulsa a esforzarnos por mantener nuestras fiestas de este año, y contamos con todos ellos para nuestras fiestas de otoño", subraya.
Esta entidad reconoce que las fiestas de este otoño "no serán como las que se han conocido hasta ahora" y que en esta "situación extraordinaria" las están "reinventando".
"También en esta ocasión las ikastolas estamos haciendo un esfuerzo especial para sacar lo mejor de nosotros mismos en esta difícil situación y dar una respuesta adecuada a la sociedad. Trabajando la creatividad, conjuntamente y dando importancia a lo local, programaremos unas renovadas fiestas de las ikastolas", enfatiza.
