Cuando 'Klaus' llegó a la vida de Iosu con solo ocho semanas, este guía canino de la Policía Foral no pensó que una década después ambos cerraría una etapa juntos. Este sábado, en el acto de celebración del patrón de este cuerpo policial, se ha condecorado a este perro, detector de droga, por sus méritos.
'Klaus' tiene ya diez años. "Le tocaba jubilarse", reconoce su guía. Y ha esperado a hacerlo justo en el momento en el que él cambiaba de unidad.
Se despiden, eso sí, por la puerta grande. Hace solo dos semanas, participaron en una intervención policial para la que el perro estrella de la Policía Foral fue indispensable. El buen olfato de 'Klaus' le guío para localizar un kilo de cocaína dentro de una bombona de butano manipulada.
Pero la hazaña no quedó ahí. En el marco de la misma investigación, el can marcó 600 gramos más de la misma sustancia dentro de un coche. Se encontraba escondida en un compartimento oculto.
"Le han dado la mención por su trayectoria", explica el guía canino. Y añade con orgullo: "Ha realizado unas actuaciones impresionantes de detección de drogas".
De hecho, la de la bombona de butano es especial porque "es la última". Pero 'Klaus' también localizó un gran alijo de droga en un control realizado en Tafalla.
No en vano, es un perro muy apreciado por otros guías caninos, tanto de la Policía Foral como de otros cuerpos policiales. "Es el padre de dos perros de Policía Municipal de Pamplona", indica Iosu.
A partir de ahora disfrutará de una merecida jubilación. "En mi casa", puntualiza el guía canino al ser preguntado por el futuro de 'Klaus'. Durante todos estos años, 'Klaus' ha formado parte de la familia de Iosu. "Siempre ha convivido con nosotros", explica. Y, por eso, ha creado un vínculo muy especial con toda la familia. "No se va a ir a ningún lado".
