Denuncian que el Ejecutivo "no plantea ningún otro escenario ni alternativa y prorroga su suspensión hasta el 18 de diciembre"
Familiares de residentes en la Casa de Misericordia de Pamplona rechazan la prórroga de restricciones decidida por Gobierno de Navarra para frenar la Covid-9 al considerar que suponen "una desigualdad de trato" para las personas en residencias y "una vulneración de derechos fundamentales" como el de movilidad y el de autonomía personal.
En este sentido recuerdan en un comunicado que el Ejecutivo foral ha anunciado que a partir del 26 de noviembre se podrán recuperar las visitas a los centros residenciales si se mantiene la tendencia descendente de los últimos días en relación al número de casos positivos.
Pero sin embargo indican que respecto a las salidas de las personas residentes "no plantea ningún otro escenario ni alternativa y prorroga su suspensión hasta el 18 de diciembre" cuando llevan sin poder salir de los centros desde el 2 de octubre.
"Navarra cuenta con 71 residencias de personas mayores en las que residen 5.300 personas aproximadamente a quienes estas medidas condicionan de manera directa, privándoles a ellas y a sus familias de derechos fundamentales", sostienen.
Y añaden que la recuperación de la visitas es "insuficiente" cuando "vivir de esta manera no es vivir, sino durar", por lo que defienden para las personas mayores en residenciales "los mismos derechos" que para "el resto de la ciudadanía" y por tanto, "de manera urgente, el restablecimiento de los mismos (por tanto el derecho a la movilidad) adoptando las medidas necesarias para su protección".
