El consejero ha subrayado la apuesta de la Comunidad foral por la mediación intercultural y afirma que "es momento de mantenerla".
El consejero de Políticas Migratorias y Justicia del Gobierno foral, Eduardo Santos, ha asegurado este viernes que la apuesta de Navarra por la mediación intercultural, que comenzó en 2008, "ha sido y es pionera", y que en la actualidad "es momento de mantenerla y reforzarla". Santos ha destacado así la importancia de un servicio que debe estar, según sus palabras, "en permanente alerta a esas necesidades cambiantes de la ciudadanía, para adaptarnos a ellas".
El consejero ha realizado estas declaraciones durante la apertura de la jornada de trabajo 'Contexto, retos y perspectiva de la gestión intercultural de la diversidad en la comunidad de Navarra', organizada por la Dirección General de Políticas Migratorias en el Civican de Pío XII, en Pamplona.
Durante su desarrollo se han presentado las conclusiones del estudio coordinado por José Manuel Álamo Candelaria, colaborador del Instituto Universitario de Migraciones, Etnicidad y Desarrollo Socia (IMEDES) de la Universidad Autónoma de Madrid (UAM).
La jornada, que ha podido seguirse tanto presencialmente como en streaming, ha servido para poner en común ese estudio con representantes del tejido asociativo de la comunidad migrante y de las entidades que trabajan en la mediación intercultural. El objetivo es reforzar y actualizar la oferta de acciones del Servicio de Mediación Intercultural del Gobierno de Navarra, ha informado el Ejecutivo.
NAVARRA COMO TIERRA DE ACOGIDA
Dicho Servicio de Mediación Intercultural, ha señalado el consejero Eduardo Santos, "resulta imprescindible para que Navarra pueda ser, realmente, tierra de acogida". Tal como ha recordado, hay ya "más de 100.000 personas nacidas fuera de nuestra comunidad" y que son parte de Navarra. "Son Navarra. Y lo han demostrado, y lo siguen demostrando cada día, incluso en las peores circunstancias", ha señalado, en referencia al estado de alarma del mes de marzo.
Además de mostrar su "orgullo" por poder definir a Navarra como tierra de acogida, Santos ha señalado que es "una obligación" que sea así. "El principal motivo es la obligación moral que, como sociedad, tenemos de ser tierra que acoge, en un mundo como este, a quien desea emprender un nuevo proyecto de vida", ha apuntado, "en un mundo amenazado por guerras, por crisis climáticas, por crisis económicas...".
Tal obligación es, además, y en palabras de Santos, "una oportunidad" para Navarra. "Es una oportunidad de riqueza, en todos los sentidos. Oportunidad de desarrollo, de crecimiento económico... y de crecimiento social", ha afirmado. "Es una oportunidad para reconocernos en una Navarra de Colores, plural y diversa; una Navarra multicultural, que valora esa multiculturalidad, y que apuesta por la convivencia", ha resumido.
NECESARIA ADAPTACIÓN A LOS CAMBIOS SOCIALES
Santos ha destacado el carácter "pionero" del Servicio de Mediación Intercultural de Navarra, que viene funcionando desde 2008 "mientras en otros lugares fue uno de esos servicios públicos recortados por la crisis"; y ha mostrado también su agradecimiento a mediadores que se vienen adaptando a los cambios, incluidos los derivados de la pandemia de Covid-19. En ese sentido, ha recordado que personal del Servicio se ha incorporado a las tareas de rastreo de contactos, "imprescindibles para evitar que el virus campe a sus anchas", ha señalado.
Precisamente para permitir esa adaptación del servicio a las necesidades de la ciudadanía, la jornada de trabajo organizada por la Dirección General de Políticas Migratorias ha querido dar voz a los colectivos implicados en la mediación intercultural, que con sus aportaciones completan el estudio realizado por José Manuel Álamo y el Instituto Universitario de Migraciones, Etnicidad y Desarrollo Social de la Universidad Autónoma de Madrid, ha precisado el Ejecutivo.
Así, la jornada ha permitido el diálogo abierto entre las personas asistentes, tanto física como telemáticamente, en torno a las conclusiones de dicho estudio; y también ha contado con el análisis de Carlos Giménez Romero, director de Instituto de Derechos Humanos, Democracia y Cultura de Paz y no Violencia (DEMOSPAZ).
Gimeno ha presentado una ponencia sobre la evolución, actualidad y utilidad de la mediación intercultural, en la que muestra el trayecto que necesariamente debe abordarse desde la acogida de las personas migrantes hasta alcanzar la deseada convivencia intercultural.
La jornada ha sido clausurada este mediodía por la directora general de Políticas Migratorias, Patricia Ruiz de Irízar.
