• jueves, 28 de marzo de 2024
  • Actualizado 10:21
 
 

CULTURA

El Gobierno foral invierte más de 205.000 euros en restaurar el puente medieval de una localidad navarra

Con una longitud de 39,90 metros franquea el río Arga y permite unir esta localidad con Agorreta

El director general, Ignacio Apezteguía, la alcaldesa del valle de Esteribar, Matilde De Añón, el arquitecto, Leopoldo Gil y acompañantes. GOBIERNO DE NAVARRA
El director general, Ignacio Apezteguía, la alcaldesa del valle de Esteribar, Matilde De Añón, el arquitecto, Leopoldo Gil y acompañantes. GOBIERNO DE NAVARRA

El Servicio de Patrimonio Histórico de la Dirección General de Cultura ha promovido las obras de restauración del puente medieval de Saigots, en el valle de Esteribar, cuyo importe ha ascendido a 205.095,32 euros.

Los trabajos han sido realizados por construcciones Leache bajo la dirección del arquitecto Leopoldo Gil y la aparejadora Nora Oroz, técnicos de la Sección de Patrimonio Arquitectónico del citado servicio.

El director general de Cultura - Institución Príncipe de Viana, Ignacio Apezteguía, ha visitado el puente medieval de Saigots, acompañado por la directora del Servicio de Patrimonio Histórico, Susana Herreros; la alcaldesa del Valle de Esteribar, Matilde Añón, y el arquitecto de la obra, Leopoldo Gil.

El puente medieval de Saigots franquea el río Arga. El grueso de la fábrica es de época medieval, aunque con demoliciones, reconstrucciones y reparaciones posteriores. El escritor David Alegría menciona esta infraestructura en la 'Guía del patrimonio histórico de los ríos de la comarca de Pamplona'.

En su trabajo hace referencia a un texto de 1550 en el que se cita una relación de infraestructuras "con derecho al cobro por el paso de madera". En este mismo texto se menciona su construcción en piedra, "estructurado por medio de dos ojos de medio punto peraltados. Cuenta con un potente tajamar, largo y afilado, aguas arriba. El de aguas abajo se encuentra oculto y descabezado. La calzada es de piedra y en ella se aprecian las tramas y el sistema de pavimentación".

Este puente unía las localidades de Saigots y Agorreta, que compartieron en numerosas ocasiones los servicios del párroco y los pleitos con el señor del palacio de Agorreta. Probablemente continuaba con el camino que enlazaba con el hospital de peregrinos de Cilveti y se cree que pudo ser utilizado por San Eulogio, obispo de Córdoba, en su visita al monasterio de San Zacarías a mediados del siglo IX. En la actualidad sobre él discurre la GR-225 y la denominada 'Ruta de la fuga de Ezkaba', que continúa hasta Urepel.

La construcción consta de dos arcos rebajados de distinta dimensión. La anchura total del puente es de 3,75 metros y la anchura de la calzada, entre pretiles, de 2,95 m, mientras que la longitud total del puente es de 39,90 m. La fábrica es de sillarejo de piedra del lugar, de color gris con labra de pico.

Desde el punto de vista estructural, el puente no presentaba desplomes apreciables. Las fábricas, pila y estribos, se mantenían aplomadas; las roscas de los arcos no presentaban deformaciones ni manifestaban desplazamientos. En algún punto de los estribos habían crecido árboles que habían reventado la fábrica.

El puente carecía de pretiles, pero quedaban restos suficientes para saber que los tuvo. La calzada conservaba vestigios de un empedrado de canto grueso de río con algún que otro remiendo de hormigón, ha informado el Gobierno foral.

TRABAJOS REALIZADOS

A lo largo de las obras de restauración, se han retirado las tierras acumuladas junto a los estribos y embocaduras para descubrir las dimensiones reales del puente. Además, se han arrancado los tocones de los árboles que habían crecido junto a él y en la propia fábrica. En aquellos puntos en los que los árboles habían reventado los muros, se han desmontado sillares para sanear el paramento y se han repuesto aquellos que se habían perdido.

Por otro lado, se han desmontado las reparaciones hechas con ladrillo y hormigón que perjudicaban la imagen del puente y se ha realizado su reconstrucción con sillares similares a los existentes. Se han saneado las juntas deterioradas, los paramentos se han limpiado con agua para no deteriorar la piedra y, por último, se han rejuntado con mortero de cal hidráulica y arena oscura de Jaca.

La reconstrucción de los pretiles se ha ejecutado con mampostería similar a la de los estribos, asentada y rejuntada con mortero de cal hidráulica, y se han rematado con una tapa o albardilla, de canto irregular, de piedra desdoble procedente de Martes (Huesca) labrada con bujarda gruesa.

Una vez construidos los pretiles, se ha ejecutado una nueva calzada con canto grueso de río colocado sobre mortero seco de cemento. El empedrado es igual al anterior y con las mismas particiones.

El puente tenía tráfico rodado para acceder a los prados e instalaciones agropecuarias que se encuentran en la margen izquierda. Al reconstruir los pretiles ha disminuido su anchura útil, y este tráfico, esporádico, se ha desplazado al cauce del río.

Para facilitar su travesía se han consolidado con grandes piedras ambas orillas, especialmente la derecha en la que se ha profundizado más de un metro. De esta forma se evita la construcción de unas rampas de hormigón que supondrían un impacto estético negativo para el puente recién restaurado.


  • Los comentarios que falten el respeto y que no se ciñan al tema de la noticia, podrán ser eliminados.
  • Cada usuario será el único responsable de sus comentarios.
El Gobierno foral invierte más de 205.000 euros en restaurar el puente medieval de una localidad navarra