El ganador fue Pello Echarri, coordinador del área técnica de empresa de Mapfre, por su compromiso con la mediación.
Más de ochenta personas asistieron este jueves 4 de febrero a la entrega del Premio Mediaoro 2015, galardón que otorga el Colegio de Mediadores de Seguros de Navarra a aquellas personas vinculadas al sector que han destacado por su labor profesional. Representantes del Gobierno foral, colegiados y miembros de compañías aseguradoras, entre otros, acudieron a esta cita anual donde se premió a Pello Echarri, coordinador del área técnica de empresa de Mapfre, por su compromiso con la mediación.
Además, se concedió una mención especial a Carmelo Eraso, que lleva colegiado desde hace 40 años. El acto, que se celebró en el Hotel Maisonnave de Pamplona, estuvo presidido por varios miembros de la Junta Directiva del Colegio. Su presidente, Alberto Moreno, hizo un balance del pasado año y destacó la “labor social llevada a cabo” con la campaña solidaria a favor de ADANO (Asociación de Ayuda a Niños con Cáncer de Navarra) en la que se recaudaron 2.000 euros y la puesta en marcha de una ‘Bolsa de Empleo’, “una apuesta que busca facilitar la contratación laboral”. Además, subrayó la gran labor que hacen las compañías colaboras junto con el Colegio para formar a los mejores profesionales, con “la convocatoria de forma periódica de seminarios, jornadas y desayunos de trabajo sobre temas de gran interés para los mediadores y que abordan los retos del futuro”.
ENTREGA DEL PREMIO MEDIAORO 2015
El secretario del Colegio, Rafa Martinicorena, entregó el Premio Mediaoro 2015 a Pello Echarri, “por su estrecha colaboración con los mediadores y por su labor pedagógica, considerado como un excelente comunicador por los alumnos del Curso Superior” que organiza el organismo. El coordinador lleva casi treinta años en la compañía, donde coincidió en sus comienzos con Martinicorena, que alabó la “firme apuesta de Echarri por la mediación”, además de dedicarle un emotivo discurso: “Nuestro sector está sufriendo la especial forma de distribución del seguro, con canales nuevos y creados muchas veces por las propias compañías para intentar abarcar el mayor espacio en el mercado. Se ha perdido el contacto, la relación personal.
Se ha banalizado el hecho de contratar un seguro. Sin embrago, cuando te topas con un interlocutor preparado, con amplios conocimientos, sin prejuicios ante el mediador y con ánimo de colaborar, brilla una luz y te hace seguirla como referencia”. Echarri, que estuvo arropado por su familia, compañeros y amigos, aprovechó la ocasión para dar las gracias a la Junta del Colegio y a su secretaria, Idoia Aguirre, “porque es una gozada colaborar con ellos y siempre me ponen las cosas fáciles” y a Mapfre “porque me ha permitido un desarrollo profesional que quizás en otras empresas no hubiera podido conseguir”.
"Si algo me gusta cuando participo en los cursos que organiza el Colegio para los mediadores es el reto que supone. No hay satisfacción mejor que la de transmitir a los demás lo que aprendes en el día a día”, admitió Echarri respecto a la colaboración con el Colegio. Además, reivindicó que “después de pasar tanto tiempo juntos trabajando” no hay que perderse en terminologías para referirse a otros trabajadores del sector: “Más que compañeros de profesión, todos somos amigos”.
MENCIÓN ESPECIAL PARA CARMELO ERASO
Emotiva también fue la mención especial que recibió Carmelo Eraso, que a sus 84 años continúa como colegiado desde 1975. María Castañeda, tesorera del Colegio, repasó la “intachable” trayectoria de Eraso, natural de Aberin de la Solana, un municipio de Tierra Estella, donde es muy querido por su calidad humana y profesional: “Allá por 1953, empezó a trabajar en el mundo del seguro gracias a un amigo de la compañía Winterthur.
Cinco años más tarde fundará, en sociedad con Juan Manuel Arza, la actual empresa de servicios ‒Arza Eraso S.L.‒ dedicada, entre otras cosas, a los seguros, la asesoría laboral y la gestión administrativa”. “Pese a que se jubiló hace ya quince años, continúa como socio de la empresa y, según nos ha contado su hija Marga, todavía es un referente para muchos de los clientes y, evidentemente, para su familia. Esperamos que sea un ejemplo a seguir para todos los colegiados”, finalizó Castañeda. El homenajeado, agradecido, apuntó que para él “ha sido una sorpresa muy agradable este premio”.
Eraso animó a los presentes a colaborar “para crear un Colegio interesante” porque hay “una necesidad de formar un ente potente”: “Me ha agradado mucho el trabajo que supone crear un Colegio con fuerza, con vitalidad, porque nos hace mucha falta”.
