Un sumatorio de gastronomía, turismo, economía social e identidad representa la tapa, una de las exquisiteces culinarias de las que ha hecho gala España y cada año potencian en Valladolid los concursos nacional y mundial que, en una nueva edición, se celebran entre este lunes y el próximo miércoles con presencia de dos cocineros navarros.
La tapa, un bocado que exige de creatividad, imaginación y calidad, "es bandera, emblema e insignia de nuestra gastronomía que mueve a la gente, invita a participar", ha manifestado este lunes Jesús Sánchez, presidente de los jurados nacional e internacional y del restaurante Cenador de Amós, en Villanueva de Pontones (Cantabria).
"Celebremos la gastronomía para estar juntos y disfrutar de todo esto", ha añadido Sánchez en referencia a un certamen "de relevancia y reconocimiento mundial" y después de más de un año de pandemia que en el año pasado obligó a la celebración de un concurso de transición debido a las restricciones de movilidad.
Cuarenta y cuatro cocineros disputarán entre el 8 y 9 de noviembre el concurso nacional procedentes de las diecisiete comunidades autónomas: Andalucía (3), Aragón (3), Asturias (2), Islas Baleares (4), Islas Canarias (1), Cantabria (1), Cataluña (2), Castilla-La Mancha (2), Castilla y León (6), Extremadura (2), Galicia (2), La Rioja (2), Madrid (2), Murcia (1), Navarra (2), País Vasco (6) y Comunidad Valenciana (3).
"La complacencia no es lo nuestro y cada año se edifica un poco más la trayectoria y alcance de estos campeonatos con una hostelería en vigor, ahora viva" después de la travesía de meses de pandemia, ha señalado por su parte el periodista Luis Cepeda, director del concurso nacional.
En cuanto al V Campeonato Mundial de Tapas, que se disputará en la jornada del 10 de noviembre con Elena Arzak y Jesús Sánchez como presidentes del jurado, reunirá a más de una decena de participantes con Portugal como país invitado, Ucrania por vez primera y representantes de España, Argentina, Chile, Ecuador, Panamá, Estados Unidos, México, Francia, Dinamarca, Irlanda, Japón, India y Emiratos Árabes.
Ambos concursos, después de diecisiete y cinco años respectivamente, son ya "un referente anual en el calendario gastronómico internacional", ha apuntado por su parte el embajador de Portugal en España, Joao Mira-Gomes, quien se ha referido al arte culinario como "un punto muy atractivo del atractivo turístico".
Prueba de ello, ha agregado Mira-Gomes, es la existencia en Portugal de una docena de escuelas de hostelería como la de Lamego, cuyo lema es el de "hacer cosas simples extraordinariamente bien".
El alcalde de Valladolid, Óscar Puente, ha aludido a la capacidad de resistencia de unos concursos que el año pasado derrotó a la pandemia, lo que en su opinión "ha hecho más fuerte" a la presente edición, mientras que el presidente de los hosteleros de la provincia, Jaime Fernández, ha elogiado la profesionalidad del sector en esos momentos tan duros.
Ha intervenido también en la presentación de los dos certámenes el vicepresidente de la Diputación de Valladolid, Víctor Alonso, convencido de que este tipo de convocatorias "ponen en valor lo que tenemos, la hostelería y su dinamización a través de un producto, la tapa, de reconocimiento nacional e internacional".
