Miles de pamploneses han desafiado al frío para ver al viejo carbonero, acompañado de animales, pastores, dantzaris, txistularis y gaiteros.
El castañero de San Ignacio, Joseba de Echarri, ha sido la gran novedad en el desfile del Oletzero 2017 por las calles de Pamplona en la tarde del 24 de diciembre.
Montado sobre su propio carro ha repartido castañas asadas a los miles de espectadores del desfile, que han resistido la espera para ver un año más la comitiva del Olentzero.
No han faltado los grupos de gansos, los cerdos, los enormes bueyes y los caballos que han hecho las delicias de los más pequeños.
También han acompañado al carbonero los txistularis, txalaparta, el zampanzar de Zubieta y los grupos de danzas del Muthiko Alaiak y de Oberena, además de diferentes coros y los carros con niños.
La comitiva ha salido con unos minutos de retraso, a las 18,10 horas, desde la escuela de artes y oficios en la calle Iturralde y Suit para realizar el recorrido habitual por la calle Paulino Caballero hasta bajar a la plaza del Ayuntamiento y volver hasta el lugar de salida por las calles Estafeta y Amaya.
La historia del Olentzero pamplonés se remonta a 1959 cuando la imagen del carbonero salió por primera vez el día de nochebuena de la mano de la juventud de San Antonio.
