El alcalde de Baztán, Joseba Otondo, ha solicitado en una sesión de trabajo en el Parlamento que el Gobierno Foral financie alrededor del 80 % de la reforma de la residencia de ancianos Francisco Joaquín Iriarte de Elizondo a través de un convenio plurianual ante la incapacidad del Ayuntamiento para asumir los 10,8 millones proyectados.
Otondo, que ha estado acompañado en la sesión por el concejal Florentino Goñi, ha reconocido que “el Ayuntamiento de Baztán no tiene capacidad para poder financiar esto” debido a que cuenta con un presupuesto anual de en torno a 8 millones de euros y ha defendido que “es responsabilidad del Gobierno dar este tipo de servicios”.
Su consistorio, ha indicado, “puede llegar a un 20%” del presupuesto con una aportación de unos 2 millones de euros, por lo que ha solicitado a través de la Comisión de Derechos Sociales que el Gobierno aporte el 80% restante a través de un convenio plurianual de 3 años y medio considerando que “el presupuesto de Navarra de 2022 tiene capacidad suficiente”. “La ley sobre las entidades locales en ningún lugar indica que los ayuntamientos tengan que hacer esos servicios”, ha referido señalando que el Gobierno “tiene una responsabilidad histórica como institución” y a pesar de eso solo cuenta con dos residencias de su titularidad.
Además, ha apuntado, el proyecto de reforma se corresponde con lo establecido en el Real Decreto aprobado en 2020 que marca el camino a seguir de atención centrada en la persona con una organización en unidades de convivencia con la mayoría de las habitaciones individuales. “Hay un decreto que hay que cumplir y al mismo tiempo es muy significativo que Navarra no vaya a tener una capacidad para poder encauzar esta renovación de unas residencias que no llegan a unos estándares mínimos para poder atender a la ciudadanía”, ha manifestado.
Otondo no ha ocultado sus reticencias sobre solicitar financiación a través de los fondos Next Generation apuntando que “si se va a hacer una reforma necesita todas las garantías y que esté todo atado” y considerando “sorprendente” que “a la hora de tener en cuenta unos servicios fundamentales como este la solución sea lo que venga de unas ayudas europeas”.
Isabel Olave, de Navarra Suma, ha asegurado que “Bildu ha justificado con este proyecto el cambio de modelo de gestión que querían” mientras el presupuesto de la obra “se va incrementando y se va haciendo inabordable”, lo que ha considerado como “un uso irresponsable del dinero público” puesto que el proyecto se redactó con 197.000 euros concedidos por el Parlamento.
La portavoz del PSN, Nuria Medina, ha defendido que “la titularidad no es del Gobierno de Navarra” por lo que “las fuentes de financiación no deben salir” del Ejecutivo y ha asegurado que como grupo no tienen “capacidad para comprometer un convenio plurianual” al tiempo que ha señalado que “la oportunidad eran los fondos europeos”.
Desde Geroa Bai Isabel Aramburu ha aclarado que “no es la de Elizondo una excepción” y ha recordado que la cuantía dispuesta por parte del Gobierno para la totalidad de inversiones en los centros residenciales de Navarra no llega a los 7 millones de euros refiriendo que “el desfase está claro” y no piensan “que sea algo factible a día de hoy”.
Por parte de EH Bildu Patricia Perales ha denunciado que “se habla de que no hay capacidad presupuestaria porque hay otras prioridades antes que el ámbito social” y ha defendido que “si hay un trabajo que está ya muy avanzado como este se puede y debemos intentar abordarlo” ya que “le corresponde a Gobierno de Navarra dar un servicio de calidad”.
