El Banco de Sangre ha pedido a la juventud de la Ribera que contribuya a salvar vidas ante la falta de reposición de los donantes más veteranos.
El Banco de Sangre y Tejidos de Navarra (BSTN) y la Asociación de Donantes de Sangre de Navarra (ADONA) han realizado un llamamiento a la juventud ribera para que las donaciones de sangre en la zona se mantengan estables, donando sangre o plasma al menos una vez al año.
El suministro estable de hemoderivados contribuye a salvar numerosas vidas y, según el BSTN, la población de donantes de la Ribera del Ebro se ve reducida anualmente a causa de las bajas por edad avanzada (a partir de los 70 años), que no se reponen con la incorporación de jóvenes.
Según las cifras recabadas por el BSTN, entre el 1 de agosto de 2018 y el 31 de julio de 2019, tan solo el 5% del total de extracciones realizadas en el área de la capital ribera proceden de nuevos donantes, frente al 7% registrado en el periodo anterior.
Concretamente, en este último se produjeron un total de 4.468 donaciones en Tudela y su entorno, 324 de ellas procedentes de nuevos donantes; mientras que en el correspondiente a 2019 se registraron 4.363 donaciones de las que 259 han sido realizadas por personas que donaron por primera vez.
El único aumento con respecto al 1 de agosto de 2018 se observa en el número de donaciones por aféresis, que han pasado de 363 a 457 en el área de la capital ribera. El conjunto de datos recabados indica que en Tudela se producen la mitad de donaciones que en Pamplona, ha informado el Ejecutivo foral.
SE NECESITAN 1.750 NUEVOS DONANTES ANUALES
El objetivo fijado tanto por el Banco de Sangre y Tejidos de Navarra como por la Asociación de Donantes de Sangre de Navarra (ADONA) persigue conseguir al menos 1.750 donantes nuevos cada año, que realizarían el 12% de las donaciones anuales.
Además, para mantener el suministro necesario en la Comunidad foral, estiman que al menos debería haber 10.000 donantes "fidelizados", que serían los que donan al menos una vez al año, de promedio.
Asimismo, para compensar las jubilaciones, unas 500 anuales, se requiere que al menos el 30% de las personas donantes nuevas se hayan "fidelizado" a los 5 años de su primera donación. Se estima que más de un tercio de donantes actuales dejarán de donar por motivos de edad o de salud en 2030.
Por otro lado, el próximo jueves 8 de agosto se van a iniciar las obras de urbanización de la calle Eza, lo que obliga a cambiar el acceso al punto de donación ubicado en la plaza de la Constitución de Tudela, que será accesible desde la calle Juan Antonio Fernández. La duración de la primera fase de la urbanización, que afecta a este tramo de la calle Eza, entre Fueros y Pablo Sarasate, tendrá una duración aproximada de tres meses.
