Fundación Caja Navarra tiene la intención de conseguir una mayor atención social a esas situaciones.
Fundación Caja Navarra destinará este año 2018 una cantidad de 150.000 euros, para dotar de recursos a dos proyectos de crisis humanitarias, que reciben ayudas internacionales insuficientes en una situación prolongada en el tiempo.
Un comité de expertos ha valorado un total de 8 proyectos de entidades expertas y los proyectos apoyados han sido dos: el primero, una iniciativa de intervención sanitaria de EACNUR en la República Centroafricana para proteger a población refugiada y el segundo, de Médicos del Mundo en Argelia, para paliar una problemática oftalmológica en las zonas saharianas de ese país.
Las crisis olvidadas son las crisis humanitarias severas que están recibiendo respuesta nula o insuficiente por parte de la Comunidad Internacional, ni cobertura mediática que lo apoye. Esta situación alargada en el tiempo deriva en un efecto de mal crónico sobre las personas damnificadas y puede conducir al colapso humanitario.
Además de la aportación económica, Fundación Caja Navarra tiene la intención de conseguir una mayor atención social a esas situaciones que se están viviendo y que son desconocidas por buena parte de la sociedad.
Por ello, Fundación Caja Navarra quiere contribuir con parte de sus recursos a paliar la deficiente atención que reciben este tipo de crisis humanitarias.
La difusión es un objetivo prioritario, a través de los medios de comunicación o de otras vías (conferencias, exposiciones, documentales…). Dar a conocer la situación que viven estas personas es fundamental para que dejen de ser crisis olvidadas.
El criterio de concesión de las ayudas ha sido el FCA (Evaluación de Crisis Olvidada) que elabora la ECHO (Oficina de Ayuda humanitaria), basado en indicadores como la vulnerabilidad del país, la cobertura mediática, la ayuda pública per cápita y una evaluación cualitativa a cargo de las unidades geográficas de ECHO y sus personas expertas.
Las áreas de intervención más repetidas en los ocho proyectos solicitados han sido: necesidades humanas básicas, con peticiones en torno a los ámbitos de la salud, la educación o el acceso al agua potable.
