Ante el estado de alarma decretado por el Gobierno de España frente a las drásticas consecuencias sanitarias de la pandemia mundial del coronavirus, ciudadanos anónimos aportan su granito de arena para ayudar a sus semejantes de manera desinteresada.
Es lo que ha ocurrido, por ejemplo, esta tarde de lunes en la Comandancia de la Guardia Civil ubicada en Pamplona. En sus instalaciones se ha personado un hombre que ha entregado al Instituto Armado un total de 1.600 guantes de un único uso.
Se trata, al igual que las mascarillas, de un material muy demandado para evitar los contagios del COVID-19 entre la población. De hecho, esta misma mañana, la Benemérita ha incautado en una fábrica de Alcalá la Real (Jaén) 150.000 mascarillas quirúrgicas, que han sido destinadas al hospital Infanta Sofía de Madrid. Lo ha hecho por decreto de la autoridad sanitaria competente.
Sin embargo, en el caso de Navarra, ha sido la acción desinteresada de una persona la que ha hecho que la Guardia Civil dispusiera de estos 1.600 guantes, que han sido entregados posteriormente por parte de una patrulla de Seguridad Ciudadana en el centro médico de Zizur Mayor para que sean empleados por el Servicio Navarro de Salud.
Además de emplear elementos como los guantes o las mascarillas, las autoridades recuerdan a la población que solo se permite la salida de sus domicilios para las excepciones indicadas en el Real Decreto del estado de alarma, tales como, entre otras, acudir al trabajo o hacer la compra.
