La renta percibida asciende como media a 4.533 euros anuales, lo que supone un aumento del 14 % sobre el año anterior, ha informado el consejero Laparra.
El número de unidades familiares de Navarra que tienen ingresos por trabajo pero necesitan recibir la renta garantizada ha aumentado en más de 1.500 desde 2016, ha informado en comisión parlamentaria el consejero de Derechos Sociales, Miguel Laparra.
En concreto, ha señalado el consejero, en 2016 había 3.684 familias con alguno de sus miembros trabajando pero con ingresos insuficientes, por lo que eran perceptoras de renta garantizada, mientras que en la actualidad ese número es de 5.275.
De hecho, ha apuntado, casi una de cada cuatro familias perceptoras se encuentra en esta situación, lo que revela una "realidad creciente", que es la del aumento de "trabajadores pobres" en Navarra.
Ha ido aumentado también el número de unidades familiares en las que, mientras estaban cobrando la renta, uno de sus miembros se ha incorporado al mercado de trabajo. De una media de 163 casos al mes en 2016, se pasó a 225 en 2017 y a 342 este año.
Este año, hasta el mes de agosto, 33.838 personas han pasado por el programa, lo que supone un aumento del 6 % sobre la cifra de 2016. Del total de solicitantes, un 57 % eran mujeres.
La renta percibida asciende como media a 4.533 euros anuales, lo que supone un aumento del 14 % sobre el año anterior, ha informado el consejero, que ha destacado que en las familias monoparentales ese incremento ha sido del 29 % y en las familias con menores a su cargo, del 43 %.
Laparra ha negado que la renta garantizada esté en "un pico", sino "como mucho en una planicie e incluso en una tendencia descendente", ya que había 12.820 perceptores en marzo, 124 más que en la actualidad.
Por tanto, ha dicho, Navarra está "muy lejos de alguna de las imágenes que se han dado de un programa en continua expansión y casi incontrolable".
El consejero ha indicado que el gasto se ha duplicado desde 2012, hasta llegar a unos 100 millones de euros anuales, y en este sentido ha subrayado que el gasto en prestaciones por desempleo en Navarra del Servicio Público de Empleo se ha reducido a menos de la mitad desde ese año (unos 200 millones en la actualidad), lo que evidencia que hay "un cada vez mayor espacio de desprotección".
La parlamentaria de UPN Maribel García Malo ha acusado al consejero de hacer "un ejercicio de autocomplacencia enfermizo" y de dar "datos muy sesgados", porque la realidad es que "está fallando su modelo, la gente no se está incorporando a nuestra sociedad".
García Malo ha afirmado que las ayudas económicas son necesarias, pero "debe ser en la mayoría de los casos una medida coyuntural", que debe complementarse con el apoyo para la inserción social y "ahí es donde usted está fallando".
Por Geroa Bai, Isabel Aranburu ha reprochado a UPN que es "incomprensible" achacar el aumento de perceptores de renta garantizada a la propia ley y ha comentado que es el aumento de recursos el que hace que haya más personas beneficiarias.
La parlamentaria de EH Bildu Asun Fernández de Garaialde ha denunciado la caída de cobertura por desempleo que se ha producido en Navarra en los últimos años, ya que se ha pasado de 434,6 millones de euros en 2012 a 202,6 millones en 2017, además de la pérdida en la calidad del empleo que se ha registrado, lo que está también en la causa del incremento en la renta garantizada.
Mikel Buil, de Podemos-Orain Bai, tras reconocer que "tenemos un modelo absolutamente diferente" al de UPN, ha resaltado que "la cantidad de cifras positivas que arrojan estos dos años de renta garantizada es indiscutible", en retorno económico, empleo y efectos fiscales.
Por su parte, Nuria Medina, del PSN, ha achacado al consejero "falta de autocrítica", que "hoy nos lleva de nuevo a visualizar un nuevo fracaso en las políticas activas de inclusión social", y ha calificado la ley de renta garantizada como "deficiente".
El parlamentario del PP Javier García ha reprochado al cuatripartito que, en materia de políticas sociales, "todo lo que prometieron queda en evidencia" y ha asegurado que "la renta garantizada está siendo un fiasco", porque "estamos haciendo más bien una sociedad subsidiaria más que una sociedad autónoma".
Ha cerrado el turno de intervenciones José Miguel Nuin, de Izquierda-Ezkerra, quien ha considerado "increíble" que "el tripartito de la oposición hable de fracaso de la renta garantizada", tratándose de una medida para paliar casos de "pobreza severa, pobreza extrema".
