En Navarra, según datos aportados este miércoles por el Gobierno foral, aproximadamente 50 personas al año fallecen a consecuencia del suicidio.
Un total de 168 personas han sido atendidas por el Programa de Seguimiento Telefónico de Salud Mental en su primer año de actividad para prevenir la repetición del intento de suicidio.
En Navarra, según datos aportados este miércoles por el Gobierno foral, aproximadamente 50 personas al año fallecen a consecuencia del suicidio, dato que se mantiene estable desde 1999.
El Programa de Seguimiento Telefónico, puesto en marcha en noviembre de 2017, pretende disminuir el riesgo de repetición de la conducta suicida y para ello realiza una contactos breves y sistemáticos mediante 6 llamadas telefónicas durante un año a las personas atendidas en los Servicios de Urgencias por un intento de suicidio.
El perfil de la persona que se suicida en Navarra es el de un varón de mediana edad, soltero, que vive solo en un entorno urbano, con bajo nivel educativo y que utiliza un método violento para consumar su decisión.
Por el contrario, el 70% de las personas de las personas atendidas en este programa telefónico son mujeres, la franja de edad predominante va de 40 a 50 años, la mayoría conviven con su familia y están a partes iguales en paro y en activo.
Otros datos reflejan que el método más utilizado en las tentativas es la intoxicación farmacológica y que en un 45% de los casos ya tenían un intento de suicidio previo.
Entre los desencadenantes adversos que se recogen destacan los problemas con amigos cercanos, vecinos o familiares, y las enfermedades, dolores o lesiones graves.
Tras un año de actividad, Salud Mental considera que este programa telefónico puede ser eficaz para prevenir futuros intentos de suicidio al constar en las llamadas una clara mejoría en la escala de Impresión Clínica Global y en la exploración de la intencionalidad de los pacientes.
Así mismo, se consigue una adherencia al sistema sanitario que puede evitar la repetición de la conducta.
Con motivo del Día Internacional del Superviviente del Suicidio este próximo sábado, 17 de noviembre, Salud Mental recuerda que la mortalidad por esta causa y los intentos autolíticos constituyen un problema de Salud Pública de elevada magnitud y complejidad, e incide en que la conducta suicida se puede prevenir y hacerlo es un objetivo prioritario de las políticas sanitarias.
Como recomendaciones frente al suicidio, Salud señala que la desesperanza, el dolor y el vacío son estados temporales, no permanentes, que el suicido no es la única alternativa para librarse del sufrimiento y que hay el apoyo de familia, amigos o médicos puede ayudar a resolver esos sentimientos.
Otros elementos que pueden ayudar son tener habilidades de comunicación, saber resolver problemas de manera adaptada, buscar ayuda cuando surgen dificultades, trabajar la autoestima y tener creencias y prácticas religiosas.
Además es importante conocer los factores de riesgo más habituales, entre ellos el trastorno mental, haber realizado tentativas suicidas, sentir indefensión, fracaso personal y desesperanza frente a la vida y al futuro, ser una persona impulsiva y con baja tolerancia a la frustración, tener antecedentes familiares de suicidio, y vivir acontecimientos vitales negativos.
En 2014 el Gobierno de Navarra fue pionero en la elaboración de un protocolo de colaboración interinstitucional para prevenir y optimizar la respuesta que se ofrece ante las conductas suicidas.
Una comisión también interinstitucional se encarga del seguimiento de dicho protocolo y de la coordinación de los recursos existentes en la Comunidad Foral, tanto públicos como de entidades sociales, para prevenir y mejorar la respuesta que se ofrece ante las conductas suicidas.
