• jueves, 18 de abril de 2024
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MEDIO AMBIENTE

La amenaza de bosques y jardines autóctonos: las plantas invasoras de Navarra

No solo la fauna amenaza la biodeversidad autóctona de Navarra, la flora y las algas también suponen un grave riesgo para la naturaleza nativa y, en muchos casos, han sido introducidas de manera intencionada.

Algas y flora invasoras en Navarra
Algas y flora invasoras en Navarra

Las especies exóticas invasoras (EEI) son una de las causas principales de pérdida de la biodiversidad en el mundo al afectar, llegando a provocar la extinción, de especies autóctonas. Esto provoca cambios y daños en los hábitats naturales e, incluso, pueden llegar a perjudicar a los humanos e infraestructuras. 

En España, según el Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico, existen unas 200 clases catalogadas como invasoras, de las que 40 tienen presencia actualmente en diferentes puntos de la geografía de Navarra.

 

Según la Ley 42/2007, de 13 de diciembre, las especies exóticas invasoras se definen como “aquella que se introduce o establece en un ecosistema o hábitat natural o seminatural y que es un agente de cambio y amenaza para la diversidad biológica nativa, ya sea por su comportamiento invasor, o por el riesgo de contaminación genética”.

De las 40 especies presentes en Navarra, 13 pertenecen a algas y flora mientras que el resto, 27, se enmarcan en el grupo fauna que a su vez se subdivide en invertebrados (8) y vertebrados (19). A continuación detallamos las especies invasoras que son algas y flora

ALGAS

 

1. MOCO DE ROCA

El conocido como Didymo o moco de roca (Didymosphenia geminata) es un alga diatomea que se distingue por su color beige, marrón o blanco (nunca verde), porque carece de un olor característico, por su tamaño mayor que el de otras diatomeas, y por el tacto que es a la vez viscoso, esponjoso y áspero.

La primera infestación observada en la Península Ibérica data de 2005 en los ríos Ara y Cinca (Huesca). No se conoce con exactitud como se produjo su entrada, pero se cree que fue de forma involuntaria por medio de aparejos de pesca contaminados. Actualmente, se dispersa por actividades humanas, mediante aparejos de pesca, canoas u otras embarcaciones, botas,...

El moco de roca puede producir masas masas gelatinosas de hasta varios centímetros de grosor y hasta 20 km de longitud, lo cual impide el crecimiento de otras algas que son alimentos de invertebrados y peces, lo cual provoca una disminución de estas poblaciones. Además, puede provocar problemas de colmatación de canales hidráulicos, comprometer el uso del agua del río o limitar la navegación. 

Actualmente no se conocen métodos de erradicación totalmente efectivos y seguros, por lo que se hace especial hincapié en la prevención para evitar su dispersión.

FLORA

 

2. MIMOSA

La Mimosa o acacia francesa (Acacia dealbata) a un árbol perennifolio, de 2-15 metros de altura (aunque puede alcanzar los 30 m). Originaria del sudeste de Australia, fue introducida para su cultivo en jardinería y, en España (en menor medida) como planta fijadora de taludes en infraestructuras viarias

Sobre el hábitat autóctono impide la regeneración de la vegetación natural destruida después de los incendios, además elimina a casi toda la vegetación bajo la copa. Del mismo modo, afecta a la salud humana ya que puede producir alergias.

Para impedir su mayor propagación se propone mantener en buen estado la cubierta vegetal natural, luchar activamente contra los incendios forestales y se recomienda no utilizar la mimosa en jardinería. Además, para eliminar árboles ya arraigados se aconseja descuajar la planta con toda su cepa o realizar un tratamiento con glifosato sobre los tocones.

 

3. PITERA COMÚN

La Pitera común o magüey (Agave americana) es una planta de aspecto robusto, formada por grandes rosetas de hojas lanceoladas, carnosas, muy gruesas, espinosas en los márgenes y en el ápice.

Se trata de una especie originaria del este de México que fue introducida en Europa, a través de España, en el siglo XVI, por los conquistadores del Nuevo Mundo, primero como planta ornamental y después como planta textil.

La pitera común aparece en lugares soleados, pedregales, ramblas, arenales, cunetas y taludes,... Reduce la biodiversidad nativa, ya que sus comunidades son tan densas que llega a desplazar a las especies autóctonas. Además, puede tener efectos adversos sobre la salud humana y animal debido a sus espinas.

El control de Agave americana se realiza principalmente mediante una combinación de métodos físicos y químicos.

 

4. ÁRBOL DEL CIELO

El Árbol del Cielo (Ailanthus altissima) es un árbol caducifolio dioico, de hasta 25 m de altura. Es originario de China, donde se cultiva por servir sus hojas para la alimentación de un gusano de seda. 

La especie fue introducida con fines ornamentales, aunque no se conoce exactamente cuando comenzó en el siglo XIX se da como naturalizada. En concreto, en casi todas las zonas no muy frías de la Península, habitando, por lo general, en cunetas, taludes, áreas periurbanas, escombreras, jardines abandonados, riberas degradadas, etc.

El árbol del cielo altera el funcionamiento del ecosistema forestal y puede dañar el alcantarillado y los cimientos de los edificios. Además, las hojas y las flores despiden un olor fétido, por lo que si las abejas visitan las flores de esta especie, comunican a la miel un sabor desagradable.

Para erradicarlo se recomienda retirar manualmente las plántulas lo antes posible, un método que debe acabar con las raíces evitando así el rebrote. Entre los productos químicos que pueden utilizarse está el glifosato, aplicado sobre las hojas o bien sobre los tocones.

 

5. ESPARRAGUERA AFRICANA

La Esparraguera africana (Asparagus asparagoides) es un arbusto que alcanza trepando los 1,5 metros de altura y que aparece en arenales y matorrales costeros, márgenes de bosques alterados, cañaverales, fincas de cultivo, etc. Es nativa del Sur de África y se introdujo durante los dos siglos pasados como planta ornamental. 

Sobre las especies, la capacidad de generar mucha biomasa (y muy tupida) de la esparraguera africana hace que no deje pasar la luz y compita con las especies autóctonas. Además, esta gran biomasa puede afectar tanto a los microorganismos del suelo como a la descomposición de la hojarasca y el reciclaje de los nutrientes.

Para controlarla, se recomienda si son plantas aisladas la extracción manual, retirando todas las raíces para evitar su regeneración. En estos casos también es útil el uso de herbicidas registrados (glifosato). Sin embargo, para poblaciones grandes se recomienda control biológico.

 

6. HELECHO DE AGUA

La Azolla o Helecho de agua son pequeños helechos acuáticos, flotantes, de hasta 10 cm, con raíces numerosas y tallos muy ramificados. Habita en aguas limpias de curso lento.

Nativa de América tropical, se ha extendido ya por todo el continente americano, así como por Asia tropical, islas del Pacífico, Sudáfrica y Europa. En España se cree que se introdujo de manera accidental con el transporte de mercancías, y en apenas 50 años ha colonizado amplias zonas de la península.

La azolla es una planta peligrosa para los humedales naturales. Modifica los ecosistemas acuáticos ya que puede llegar a tapizas, a modo de alfombra, grandes superficies de agua, reduciendo la cantidad de luz que llega al interior y haciendo desaparecer a la vegetación sumergida. Esta afección llega a perjudicar a un buen número de aves cuyo alimento son estas plantas acuáticas.

Además, también disminuye la concentración de oxígeno, por lo que reduce la calidad del agua. En este sentido, al eutrofizar el agua dificulta su uso directo para la agricultura. Por último, facilita la proliferación de mosquitos.

El método más utilizados para su control es la retirada manual, aunque también puede controlarse con herbicidas. Sin embargo, estos no se aconsejan en ambientes tan frágiles y valiosos como los humedales.

 

7. ARBUSTO DE LAS MARIPOSAS

El arbusto de las mariposas o lilo de verano (Buddleja davidii)  es un arbusto caducifolio o semi-caducifolio, leñoso y muy ramifi cado, que puede alcanzar los 4 metros de altura.

Se trata de una especie originaria de China central y del Tíbet, que se ha empleado en toda España como arbusto ornamental, habiéndose naturalizado en diversos puntos como en los Pirineos.

El arbusto de las mariposas compite y desplaza a las especies nativas, en especial afecta terrenos que antes eran de vegetación sauceda. Puede impedir el acceso a los ríos. 

Entre las recomendaciones para su control se pide evitar su empleo en jardinería en las zonas de riesgo y podarlo anticipadamente en otoño para impedir que se dispersen sus semillas.

 

8. HIERBA DEL CUCHILLO

La hierba del cuchillo o uña de león (Carpobrotus acinaciformis) es una planta reptante, con tallos largos, de hasta 3 metros y cortas ramas. Las flores son de color rosa o púrpura, grandes y solitarias.

Es originaria de sudáfrica y se encuentra ampliamente introducida y naturalizada. Habitualmente se usa como planta ornamental, aunque también ha sido utilizada para cubrir taludes y dunas litorales.

Tiene un carácter invasor agresivo, con clara tendencia a aumentar rápidamente sus poblaciones si no son controladas. Altera la estructura y abundancia de las especies nativas ya que disminuye la disponibilidad de nutrientes y altera el pH del suelo. Además, forma alfombras muy tupidas que impiden el desarrollo de otra vegetación.

El método de control y erradicación más utilizado ha sido la retirada manual, aunque también se puede usar con éxito el glifosato, aplicado en invierno.

 

9. HIERBA DE LA PAMPA

La hierba o carrizo de la Pampa (Cortaderia spp.) son un género de plantas que abarca a más de 20 especies. Son plantas herbáceas perennes, graminoides, con raíces largas, gruesas y profundas. Los tallos son fuertes y de hasta 4 metros de alto. Las flores se disponen en panículas grandes, plumosas, densas, blancas o rosadas. 

Procedente de América del Sur, se introdujo como planta ornamental y se ha naturalizado en otras áreas desde los jardines donde se ha cultivado. Son plantas rústicas, bien adaptadas a las temperaturas extremas y a la sequía.

En España, su capacidad para invadir riberas y zonas fluviales la convierte en una especie muy peligrosa para estos ecosistemas. Además, puede disminuir la calidad forrajera de los pastos. Por último, se alerta de que puede producir problemas alérgicos.

La eliminación manual de las plantas debe realizarse con las manos y la cara debidamente protegidas, ya que las hojas son muy cortantes. Si ecológicamente resulta soportable, pueden utilizarse algunos herbicidas como el fluazifopp-butil éster o el glifosato.

 

10. HIERBA NUDOSA JAPONESA

La hierba nudosa japonesa (Fallopia japonica) es una planta herbácea perenne, rizomatosa, con tallos aéreos de hasta 3 metros de altura. Originaria de Japón, Corea y China, en Europa se introdujo de manera intencionada como posible cultivo forrajero.

Necesita climas húmedos y soporta los fríos invernales intensos y coloniza orillas de ríos y lagos, cunetas, vías férreas, terrenos incultos, claros y orillas de bosques frescos, etc. Por ello, los Pirineos se consideran en Navarra zona de riesgo ya que es una especie extremadamente peligrosa porque es capaz de extenderse fácilmente.

Además de desplazar a la vegetación autóctona, puede provocar contaminación orgánica en los suelos por la mala descomposición de sus hojas. También puede perjudicar a la fauna indígena por no estar preparada para utilizar esta planta.

Por último, también produce daños económicos importantes al reducir la capacidad de desagüe de los ríos y canales y dañar las construcciones y obras públicas.

 

11. TABACO MORUNO

El tabaco moreno o negro (Nicotiana glauca) es un arbusto perenne o pequeño árbol generalmente de unos 3 metros, aunque puede alcanzar hasta 7 de altura. Sus hojas son gruesas de forma ovada y las flores son amarillas y tubulares, de 3-4 cm de longitud.

Nativo de Sudamérica, el tabaco moreno se introdujo como planta ornamental. En España es muy invasora y se encuentra ampliamente naturalizada en gran parte de las Comunidades Autónomas (muy peligrosa y especialmente problemática en Baleares y Canarias).

Todas sus partes son extremadamente venenosas y tóxicas, y se han descrito numerosos usos medicinales, antifúngicos e insecticidas. Sin embargo, estos usos no pueden compensar los impactos negativos de la planta. De hecho uno de sus componentes provoca intoxicaciones severas en humanos y animales e incluso la muerte por parálisis respiratoria.

Además, supone una amenaza para la vegetación nativa por competencia, reducción y alteración del espacio o los recursos. Por ello, es considerada una especie invasora de categoría 3, es decir, que invade hábitats naturales o seminaturales de algún interés en conservación.

Para controlar su desarrollo, debido a su capacidad para rebrotar los métodos mecánicos de control son limitados. Sin embargo, la retirada manual de pequeñas plantas, arrancándolos o desenterrándolos, es efectiva y para plantas más grandes es necesaria maquinaria pesada.

 

12. CHUMBERA

La chumbera apretada (Opuntia stricta), conocida también como pera espinosa, es un arbusto de hasta 2 metros de altura (aunque no suele sobrepasar el metro), al principio erecto y después con tendencia a achaparrarse por su propio peso. Tiene unas pequeñas protuberancias con cerdas espinosas.

Es una planta nativa del Sudeste de Estados Unidos, México y Cuba, que se introdujo en el siglo XX de manera intencionada como planta ornamental y para formar setos protectores en zonas áridas.

En zonas áridas y cálidas compite con la vegetación autóctona, desplazándola o impidiendo su regeneración. Está incluida en la lista de la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza como una de las 100 peores especies alóctonas invasoras del mundo.

Para controlar su expansión se recomienda retirarlo de forma manual en casos de invasión leve, ya que se regenera rápidamente a partir de cualquier fragmente que haya en el suelo. En estos casos, las operaciones se deben hacer con cuidado por las púas.

 

13. AGRIO

El agrio (Oxalis pes-caprae), también conocido comúnmente como villagrera o vinagrera, es una planta herbácea perenne, con un bulbo profundamente enterrado del que emerge un tallo subterráneo que acaba en una roseta de hojas situada al nivel del suelo. Las flores son de color amarillo brillante, relativamente grandes, y nacen en racimos sueltos.

Se trata de una especie originaria de la región del Cabo, en Sudáfrica. Se introdujo en la cuenca mediterránea de manera involuntaria como suelen hacer las malas hierbas agrícolas (contaminación de partidas de semilla, presencia de diásporas en los productos agrarios, etc.). Se desarrolla en aguas más o menos estancadas y de movimiento lento.

El agrio provoca la expulsión de la vegetación nativa por competencia directa por la luz y el espacio, inhibiendo además la germinación de sus semillas. Además, propicia la entrada de otras especies invasoras. Por otro lado, se le considera una mala hierba agrícola de cultivos y puede ser tóxica para el ganado si es consumida en grandes cantidades.

Su control sólo resulta viable para pequeñas poblaciones, si estas ya son numerosas son muy difíciles de erradicar y requieren muchos años de control continuo.


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