César López, pamplonés de 42 años, de la pirotecnia navarra 'Fiesta' es el encargado, desde hace cuatro años, de preparar el cohete que se lanzará en el Chupinazo de San Fermín.
Juan Carlos Unzué ha accedido al balcón del Ayuntamiento de Pamplona en silla de ruedas subido a una rampa. Una vez colocado, la mano de César López le ha ayudado a colocar la mecha y encender el primer cohete de las fiestas de San Fermín.
Acerca de Unzué, ha señalado: "coincidí con él el día de la ELA con su mujer. Da visibilidad a una enfermedad muy grave. Mi labor es que no se queme una vez que se enciende el cohete, que quite la mano. Mi labor es básicamente esa. Me preguntó qué se siente y le dije que eso hay que vivirlo".
Es el cuarto año que están en el balcón: "Decidimos hacer continuidad con los años anteriores como si no hubiera pasado nada. Cohete rojo, imagen de San Fermín y escudo de Pamplona. Es lo más conveniente, representa lo que es el momento. Es muy emocionante para nosotros en las fiestas de mi pueblo", asegura César.
Básicamente llevan una carga de 25 gramos de fulminante que es lo que hace que explote en el cielo y una carga de subida para que el cohete ascienda, y el palo. Unos 50 centímetros en total", señala César.
Hay cuatro cohetes iguales: "Luego lanza el alcalde y hay más para protocolo que no tienen ningún tipo de decoración. Tenemos tres preparados para el momento clave. No podemos probar el primero pero sí por lotes. Probamos cinco o seis de cada lote por tranquilidad".
No solo se llevan esos cuatro cohetes sino que también llevan otros 48 para que otros invitados puedan lanzarlos. Sin embargo, esos no son como el original con las imágenes.
Los hermanos César y Andrea acuden en persona cada 6 de julio al Ayuntamiento y, aunque no se encarguen de tirar el cohete, sí que acompañan al protagonista del chupinazo. Ya han acompañado a Motxila 21, la DYA y a la Pamplonesa.
Pirotecnia Fiesta no solo se encarga del cohete del Chupinazo, también distribuye los del encierro y los toros de fuego. Por segundo año, volverán a lanzar los cohetes del Pobre de mí. Más de 100 cohetes que esta empresa de Navarra distribuirá para dar sonido y color a San Fermín.
En 1988, los padres de Andrea y César López comenzaron con el negocio de la pirotecnia en un pequeño local del barrio de Azpilagaña. En 2012, dieron un salto más grande y montaron un almacén en el polígono de Beriáin para poder servir más a nivel de Navarra. Además, también llevan un negocio de vajillas y utensilios reutilizables.
el almacén de Beriáin es además una tienda abierta al público en la que venden todo tipo productos relacionados con la pirotecnia. "La gente no sabe y cualquiera puede venir a comprar desde la típica bombeta hasta fuegos o pirotecnia para niños". La seguridad lo es todo y a los hermanos López les gusta dar explicaciones de seguridad, lo más importante dentro de la pirotecnia.
