Abrió el pasado 7 de julio y ha reinventado el concepto de los disfraces de los gigantes por su comodidad. Desde entonces, niños y adultos quieren hacerse con uno.
Si has pasado los Sanfermines en Pamplona, es probable que ya hayas visto a más de un niño vestido con el traje de uno de los gigantes de la Comparsa de Pamplona.
Se trata de una nueva gama de disfraces que ha llegado este 2018 para hacer posible que los niños puedan encarnar a las populares figuras de la fiesta con la comodidad de no tener que cargar con una pesada estructura de madera.
Detrás de estos trajes se encuentra la pamplonesa Susana Mendióroz. Ella es educadora infantil en el Ayuntamiento de Pamplona y su pasión por ver felices a los más pequeños ha sido la que le llevó a inaugurar el pasado 7 de julio la tienda de disfraces de los gigantes Txikiliki.
Desde entonces, la popularidad de estos atuendos no ha parado de crecer, y no solo entre los niños, sino también entre los adultos.
Así las cosas, Mendióroz cuenta a Navarra.com cómo gracias a su sobrina pequeña surgió la idea de esta tienda y las curiosidades de los vestidos que venden.
"Todo comenzó hace dos años. Tenía una sobrina pequeña a la que le gustaban mucho los gigantes y quería ir vestida de Joshepamunda pero de forma cómoda, para poder jugar y bailar, sin los clásicos disfraces que llevan un armazón de madera y que a los pequeños se les hacen pesados", relata la diseñadora.
"Entonces, vi la oportunidad de negocio porque confeccioné el disfraz de la giganta y la gente que la veía vestida por la calle comenzó a preguntar a mi hermana dónde lo había comprado", agrega.
Así las cosas, Mendióroz detalla que lleva alrededor de un año trabajando en la apertura del negocio. Para ella, lo más difícil ha sido encontrar los modelos de los gigantes que vende. "El traje original es un armazón de madera y ha habido que adaptarlo al cuerpo de los niños para que les quede bien y les favorezca", detalla.
En este sentido, cuenta que diseñar un solo traje puede llevar de 8 a 10 horas, aunque como todo, la dificultad varía según el modelo a elaborar. A su juicio, los más fáciles de fabricar son los americanos Toko Toko y Braulia "ya que no tienen tantos detalles". Por otro lado, Joshepamunda es para ella el diseño que mas costó encontrar para adaptarlo, por el corsé que lleva.
"Tenemos un taller de confección que nos ayuda a satisfacer la demanda. Nosotros les enviamos nuestros diseños y patrones, supervisamos la calidad, detalles y encajes de los trajes que elaboran y los ponemos a la venta", explica.
DISFRACES PARA TODAS LAS EDADES
Para Mendióroz "la acogida de los trajes ha sido estupenda". La vendedora cuenta que "ha venido mucha gente" que le ha "sorprendido" la demanda de las prendas por parte de gente adulta. "Hay muchas personas mayores que también quieren estos trajes para Nochevieja, para que los utilicen dantzaris o para llevarlos en despedidas de soltero", especifica.
Así las cosas, cuenta también que tienen una gama de tallas que va desde los niños de 18 a 24 meses hasta el público adulto. Además, los vestidos están equipados con gomas que permiten ajustarse al cuerpo de cada uno y estos se pueden adquirir en tela de disfraz o en otra de mayor calidad.
Por otro lado, Mendióroz señala que, por el momento, la tienda abrirá sólo durante los Sanfermines pero mantendrá la venta de disfraces durante el resto del año a través de su página web.
"Llevo en Pamplona toda mi vida y más de 30 años dedicándome a los niños. El poder tener contacto con los ellos y unirlos a Pamplona a través de los disfraces es muy bonito. Me encanta ver su cara de ilusión cuando se van de la tienda saludándote con el traje puesto", concluye.
