La youtuber navarra ha relatado en un vídeo los prolegómenos de su viaje a Estados Unidos junto a toda su familia.
Verdeliss, una de las influencers navarras con mayor repercusión en las redes sociales, ha revelado en uno de sus últimos vídeos en YouTube cómo le está afectando tanto a ella como a la relación con su marido, Aritz, todo el esfuerzo dedicada en su nueva casa, ubicada en Mutilva.
En el vídeo ha compartido las imágenes del día antes de su viaja a Los Ángeles, en Estados Unidos, invitada por una firma de juguetería para la presentación de una nueva muñeca. En principio, el viaje iba a ser solo para ella, pero finalmente la acompañó toda la familia: su marido y sus siete hijos.
Primero, recalaron en un supermercado para hacerse con provisiones y abundante comida para todos los niños durante el trayecto en avión. Además, también aprovecharon para renovar sus maletas.
Antes de salir para el aeropuerto, los más pequeños disfrutan jugando, hasta el límite de que piden a los padres estar "un minuto más". "El último minuto. Eso lo han aprendido de nosotros, porque siempre les estamos dando largas. Están repitiendo nuestros patrones y por eso no es justo que les riñamos", expone Verdeliss.
La youtuber navarra explica a continuación como la llamaron para cubrir el evento en Estados Unidos y cómo acabó viajando con toda la familia: "La idea era ir yo sola, pero el viaje de trabajo va a terminar siendo uno de placer. Ha sido una decisión muy rápida, para desconectar".
En ese instante, aclara que las cosas no van muy bien con su marido. "Anímicamente, la nueva casa nos tiene al límite en nuestra relación de pareja y familiar. Habíamos perdido mucho los nervios. Este viaje, económicamente es un dolor, pero merece la pena, porque va a ser un desahogo para nosotros. Lo mal que hemos estado y seguimos estando", confiesa en el vídeo.
SIN VUELO EN LAS PANTALLAS
De madrugada y después de cenar hamburguesas en el coche, llegan al aeropuerto, donde la navarra se siente asustada, al no haber nadie en los mostradores y no aparecer su vuelo en las pantallas. "Tenemos que embarcar a las 4, y por eso no nos hemos quedado en un hotel", apunta.
Mientras, los niños se cuentan entre ellos cómo es viajar en un avión, con pantallas en los asientos en los que se pueden ver películas. Después, se ponen a pintar cuadernos tumbados en el suelo, para terminar utilizando los lavabos como canastas, en una divertida competición de baloncesto. Sus correteos por la terminal finalizan con algunos de ellos dormidos en los carros de las maletas.
Una vez en Los Ángeles, Verdeliss graba cómo llegan hasta la empresa, momento en el que describe las características de la nueva muñeca. "Con esta forma de jugar, les estamos dando herramientas a los niños para que se expresen. Qué bueno que las empresas apuesten cada vez más por juguetes con valores", indica.
La muñeca en cuestión puede cambiar la forma de su pelo, la tez de su piel, sus accesorios, sus vestidos... "El juguete son seis kits con varias prendas y pelos, para que puedas crear la muñeca a tu manera. Es una forma de que los niños puedan expresarse, ya que todo el mundo es bienvenido. Cada niño, como cada muñeca, es especial", incide la pamplonesa.
ASPECTOS POSITIVOS
Para Verdeliss, esta manera de jugar tiene más puntos positivos, como que "muchos niños proyectan en la muñeca cómo es su realidad". "Estoy viendo a mis hijos jugar y estoy entendiendo cómo son o cómo sienten", resalta.
La visita continuó por los talleres de diseño, donde se pintan las muñecas y les ponen el pelo (cada una tiene opción de pelo corto o pelo largo), y el centro de moda, en el que se preparan todas sus prendas de ropa, con las diferentes propuestas para cada juguete.
