El ANAIM Club Fest, el festival de música que se repartirá por cinco salas de Pamplona, pone en marcha el sistema de trazabilidad de las entradas para los eventos en Baluarte y Navarra Arena.
El festival, que comienza este sábado con la actuación de Lola Índigo en el Navarra Arena, lo hará con medidas de seguridad y sanitarias recogidas en un protocolo que compartirá también el Auditorio Baluarte “y que ha contado con el apoyo del Instituto de Salud Pública”, confirma a EFE Javier Lacunza, director gerente de NICDO.
Se trata de un protocolo que también afecta a otros elementos de seguridad y que se está poniendo en marcha ya en el Auditorio Baluarte para el festival 'Flamenco on Fire'.
El sistema de trazabilidad de entradas, “un sistema ya implantado por cómo funciona el sistema de ventas online”, asegura Lacunza, trae novedades en cuanto a las compras múltiples para los espectáculos en Navarra Arena y Auditorio Baluarte.
En estos dos espacios, además de solicitar el nombre de la persona compradora de las entradas, también se solicita el nombre de las acompañantes “para que en el supuesto caso de que haya un brote, se pueda facilitar la trazabilidad del rastreo a los equipos de Gobierno de Navarra”.
“Cuanto mejor se trace esta línea, mejor será el adelanto de trabajo”, afirma el director gerente de la sociedad. Sin embargo, este festival repartirá sus actuaciones en cinco salas: además de Baluarte y Navarra Arena, participarán Totem, Indara y Zentral, con sus sistemas de venta de entradas propio.
A pesar de que no existe una pasarela de venta única para las cinco salas, sí que se ha solicitado que la venta de entradas se realice en la plataforma de cada recinto. “Ahora en recintos hay que tener mucho más cuidado, hacemos que usen nuestras plataformas de venta”, señala.
Sin embargo, Lacunza confirma que solo puede hablar por el sistema de las salas gestionadas por NICDO y no por las tres salas restantes.
Ante un caso de reventa de localidades, admite que “a tanto no se puede llegar” con el sistema implantado. El director gerente de NICDO afirma que en este caso “puede haber más riesgo en parar una entrada de público con una saturación de colas” si hay que comprobar una sustitución de personas asistentes.
Añade que “en algunos casos lo perfecto es enemigo de lo bueno, y en ocasiones hay que dejar algunos flecos sueltos” aunque se muestra confiado en que “en una hipotética situación de necesidad de rastreo, cabe pensar que los acompañantes avisarán a aquellas personas que hayan cambiado” en su asistencia final.
Lacunza quiere “dejar claro que se ha procurado hacer todo lo posible y lo que está en nuestras manos para minimizar los riesgos en la vuelta a los recintos de interior”. También recuerda que las grandes salas navarras no serán las primeras, sino que el Teatro Real "ya lo experimentó hace unos días".
Las medidas de seguridad que completan el protocolo elaborado por NICDO en colaboración con el Instituto de Salud Pública aumentará de una a tres las puertas de acceso en el Auditorio Baluarte, un hecho que “permite segregar al público desde fuera, para que las colas y tiempos de espera sean los mínimos y se eviten aglomeraciones en el acceso”.
Además, el plano de sala se ha configurado para que se puedan reservar localidades por bloques de una, dos y tres personas para que exista separación.
Un hecho que se une a la reconfiguración del aforo de la sala de Baluarte, al 70,4 % y no al 75% que permitirá eliminar la primera fila de butacas para “dotar de distancia a los cantantes del público” y para poder evacuar al público por la puerta de abajo, antes inutilizadas.
En Navarra Arena se ha configurado el formato 'Arena Club', contando con 200 mesas en el foso, organizadas en grupos de dos o cuatro personas. Cada mesa tiene “una distancia muy grande respecto de la que está al lado”.
Este formato Club “permite también profundizar en la experiencia de usuario, mucho más agradable con este sistema de mesas y sillas que simplemente con una silla en el suelo”, afirma Lacunza.
Además, el aforo en el recinto se limita a 1.226 personas, con 626 localidades en la parte del foso y otras 600 en las gradas y butacas preferentes “en un espacio que tiene una capacidad total de 11.800 personas y deja el aforo en cifras muy inferiores”.
A todo ello se unen el sistema de hostelería a mesa, frente a las habituales barras y un protocolo “de ventilación y limpieza, muy completa y compleja” que acompañará a los eventos en recinto cerrado a partir de ahora frente al coronavirus.
LOLA ÍNDIGO ESTRENA ESTE ESPACIO
Lola Índigo y su cuerpo de baile serán las responsables de dar el pistoletazo de salida al festival, con su Tour Akelarre que reunirá a más de un millar de espectadores en un Navarra Arena convertido, debido a la nueva normativa, en el renombrado Arena Club: 1.226 espectadores (626 en pista en mesas y sillas y 600 en grada) con accesos y salidas
sectorizados, servicio de hostelería en mesa y trazabilidad en la venta de entradas.
HORARIOS PREVISTOS:
ACCESOS:
Se ruega puntualidad a los asistentes para evitar colas y facilitar un acceso escalonado y seguro. Las puertas se cerrarán 5 minutos antes del comienzo del espectáculo.
