La Sección Oficial se abre hoy con las tres primeras cintas: "Oleg y las raras artes", "Cantonese Rice" y "Las letras".
La Sala de Cámara del Auditorio Baluarte acogerá este lunes 8 de febrero, a las 20:30 horas, la película inaugural de esta X edición del Festival de Cine Documental Punto de Vista, Il pianeta azzurro (1982, 83’), de Franco Piavoli; un recorrido por la campiña italiana a lo largo de las cuatro estaciones, un canto a la vida y un viaje celebrativo a través del tiempo.
La jornada está marcada, también, por el inicio de las proyecciones que concurren a concurso en la Sección oficial-La región central, cuyos filmes han sido presentados en rueda de prensa por los propios cineastas.
Se estrenan, asimismo, la retrospectiva dedicada a Jean-Daniel Pollet y la primera sesión de cortos dedicados al tiempo, "Ten Years Older".
Y se celebra, además, una sesión especial con Claire Simon, cineasta que presentará, su último largometraje, Le Bois don’t les reves sont faits, (El bosque donde los sueños se cumplen), que se exhibirá a las 17.00 horas, en la Sala de Cámara.
INAUGURACIÓN: IL PIANETA AZZURRO, DE FRANCO PIAVOLI
Como se ha avanzado, la Sala de Cámara del Auditorio Baluarte acogerá a las 20.30 horas la proyección de esta cinta, que forma parte de la retrospectiva dedicada al tiempo y el cine, (Ten Years Older), alabada por Ermanno Olmi, glorificada por Bertolucci, y a la que Tarkovski se refirió como “un poema anti-disney”.
El planeta azul es un viaje celebrativo a través del tiempo en su concepción más pura, con la naturaleza y el paisaje en pleno éxtasis cambiante, sin diálogo, con música de Ennio Morricone como única respiración. Los espectadores viajarán por el gélido invierno de la campiña italiana, pasando por la explosión de la primavera, y atravesando el otoño y verano, con estampas del ser humano, que también viaja por los diferentes estados que el tiempo le provoca: el amor, la infancia, el dolor, el trabajo, la admiración. Una celebración de la vida en el planeta en el que vivimos.
SECCIÓN OFICIAL - LA REGIÓN CENTRAL
La Sección Oficial abre este lunes la competición con las tres primeras cintas: Oleg y las raras artes , del español Andrés Duque (2016, 70’), Cantonese Rice del cineasta Mia Ma (Francia, 2015, 50’) y Las letras (2014, 58’), del mexicano Pablo Echeverría; las dos primeras se han exhibido a las 10.00 horas, y la tercera, a las 12.30, todas ellas en la Sala de Cámara de Baluarte.
Los directores Andrés Duque y Mia Ma, junto al músico ruso Oleg Karavaichuk y Diego Amando Moreno (miembro del equipo técnico de Las letras), han presentado esta mañana sus películas en rueda de prensa.
Oleg y Las raras artes, de Andrés Duque (España, 2016, 70’): En esta cinta -que es estreno en España- Andrés Duque se acerca a Oleg Karavaichuk con parsimonia y sutileza. Oleg K., un músico que a sus 89 años continúa siendo una figura enigmática para la cultura rusa y más aún para la internacional. ¿Quién es este hombre que parece sacado de un cuento de Gogol? Oleg tiene el privilegio histórico de ser el único que puede tocar el gran piano imperial guardado en el Ermitage los días en los que el museo cierra. Pero también tiene un privilegio más actual: el de desafiar cada día con su arte la identidad de su país transformándose y reinventándose a cada instante.
Oleg Karavaichuk, con ya 94 años y un espíritu poco ortodoxo, el artista y compositor de San Petersburgo, Oleg Karavaichuk, ha celebrado un encuentro con los jóvenes participantes en Punto de Vista, para desentrañar su aproximación al mundo de las artes y su relación con el piano como centro vital de su estancia en el mundo.
Cantonese Rice, de Mia Ma (Francia, 2015, 50’): la película ofrece el privilegio de entrar en la casa e intimidad de una familia china en el extranjero, una de las inmigraciones que suelen ser más reservadas y herméticas. Una abuela cantonesa que ama el queso del país de adopción, pero no la lengua, junto a un padre que también a menudo es reacio al nuevo país. La adaptación, a Francia en este caso, vista desde los ojos rasgados de una protagonista que no habla chino. Todo en clave de ensayo, no exento de humor, y su gran paradoja: cómo encontrar el país de origen a través de los compañeros de inmigración.
Las letras, de Pablo Chavarría (México, 2015, 77’): Esta cinta, que es también estreno en España, es el quinto filme de Pablo Chavarría, que propone aquí un viaje sensorial y elusivo sobre un juicio no aclarado en Chiapas. En junio de 2000, cuatro policías aparecen asesinados. Un profesor y activista de la región mexicana, Alberto Patishán, es condenado a 60 años de prisión por ello. De vez en cuando escuchamos las cartas que escribe a sus hijos: “La esperanza es un contrato ingenuo con el tiempo”, les escribe. Abstracción e hipnosis como mejor manera de filmar una justicia nada clara y la violencia en un país que intenta esquivarla sin éxito.
TEN YEARS OLDER: EL TIEMPO Y EL CINE
El director artístico de Punto de Vista, Oskar Alegría, presentará este lunes a las 17.00 horas, esta y todas las demás sesiones de la retrospectiva dedicada al tiempo. En la primera de ellas titulada “Las edades del hombre”, se verá al ser humano nacer y envejecer a través de distintos cortometrajes de diferentes cineastas y épocas, que incluyen los siguientes cortometrajes:
Window Water Baby Moving de Stan Brakhage (1959, 12’) Brakhage realizó 400 películas y filmó el parto de varios de sus hijos. Éste es el primero de ellos, con su primera mujer Jane y rodado en casa. Un festín de carne, sangre y agua que celebra sin cortapisas el origen del mundo.
Nueva Vida de Kiro Russo (2015, 15’). Primeros balbuceos. El niño va creciendo junto a sus padres. Todo es visto, o espiado, desde la ventana de enfrente. Vemos como una pareja vecina cuida a su recién nacido, lo mima y le protege de las primeras amenazas. Una bella película con forma de arrullo.
Ten Minutes Older de Herz Frank (1978, 10’). Infancia. Magistral corto histórico que tiene la radicalidad de mantener el plano fijo en el rostro de un niño que contempla absorto un espectáculo de marionetas. Solo seguimos el desarrollo de la obra a través de los reflejos de su cara: el temor, la alegría, la duda y la gloria, todo cabe en su mirada que envejece con este filme diez minutos.
Seven Women at Different Ages de Krzysztof Kieslowski (1978, 15’). El corto avanza de la infancia a la vejez, paso a paso a través de siete mujeres de diferentes edades en un taller de danza. El maestro Kieslowski crece con ellas desde los primeros pasos de una principiante, al control absoluto en la que es más adolescente. Después, las fatigas, sueños y achaques que afloran en las siguientes edades. El paso del tiempo como en una danza circular.
10 de Marta Jurkiewicz (2015, 30’) De edad en edad. Rostros mudos oyen la voz de alguien que es una década mayor y así se van pasando el relevo sucesivamente en una película que crece en cadena de 10 años en 10 años, pero ¿qué ocurrirá si alguien muere? ¿Quién contará su relato? ¿y quién lo oirá?
Invisible de Zofia Pregowska (2014, 22’). Narra la edad final. 90 años, cifra redonda, más si se llega a ella como Krystyna, con la fe intacta en la poesía. Krystyna es una anciana polaca que escribe en la oscuridad poemas que a veces solo ella entiende, perdiendo la vista, con un bolígrafo que no marca, versos que nos hablan de un perro de tiza que simboliza la eternidad.
POLLET: LA CASA Y EL MUNDO
El cineasta y docente Guillermo G. Peydró, miembro del comité de selección del festival y programador de la retrospectiva dedicada a Jean-Daniel Pollet, introducirá la primera sesión a las 17 horas, en la Sala Corona de Baluarte, con la presencia de Boris Pollet, hijo del cineasta francés.
La sesión incluye los cortos Bassae (1964, 8’) y Méditerranée (1963, 42’).
Méditerranée es un poema de 35.000 kilómetros que intenta esbozar por permutaciones de imágenes una definición del Mediterráneo, de sus ritos y espacios, de su memoria. En el centro de todas sus imágenes hay un templo: Bassae.
SESIÓN ESPECIAL CLAIRE SIMON
Como parte del jurado de la Sección Oficial–La Región Central, Claire Simon presentará a las 17.00 horas, en la Sala de Cámara su último largometraje, Le Bois don’t les rêves sont faits(2015, 144’), retrato del bosque de Vincennes a las afueras del gran París. Como una forma accesible de edén perdido al alcance de todos, las personas acuden allí a buscar refugio o soledad, según se mire. El bosque admite a gentes de todas las clases sociales, sin distingos, y abre sus brazos a cada habitante cansado de la ciudad. Aquí las dificultades de vivir en el asfalto se quedan atrás y aparece una especie de terapia verde: el ciudadano juega, se divierte y sueña, todo lo contrario a lo que de normal ocurre en su realidad gris.
