El que fuera Ranger de Texas regresaba a Las Vegas de un torneo de lucha libre del que él mismo es fundador cuando ha sufrido los dos graves achaques.
Quizás sea hora de tomarse más en serio la frase que dice que "Chuck Norris murió hace 10 años, solo que la Muerte no ha tenido el valor de decírselo". El popular actor pelirrojo de películas de acción, que, a base de repartir leña en el celuloide desde los 70 se ganó la fama de tipo duro, ha sobrevivido a nada más y nada menos que dos infartos en un lapso de 60 minutos.
Chuck Norris se ganó la fama como actor de películas donde sacaba a relucir su dominio impecable de las artes marciales. De hecho, uno de los sellos de identidad de la celebridad es su famosa "patada voladora", que, según cuentan leyendas de Internet "no te mata, sino que te envía a otra dimensión".
Todo ocurrió el pasado 16 de julio. El rudo actor acababa de participar en El Campeonato Mundial de la Federación de las Artes de Lucha Unida, fundado por él años atrás, y regresaba a Las Vegas para reunirse con su familia.
Durante el viaje, realizó una parada en un hotel de Nevada para dormir. Ahí, decidió darse una ducha, pero durante la faena cayó al suelo debido al inesperado paro cardíaco, según informa el portal norteamericano Radar Online. Por suerte, fue trasladado en una ambulancia al hospital, donde volvió a despertar. Según afirman las fuentes, el actor pudo "dejar de respirar" en un momento, aunque afortunadamente no fue a más.
Sin embargo, Norris volvió a sufrir otro revés cardíaco al poco tiempo de su primera reanimación. Al encontrarse en el centro, la asistencia médica logró volver a despertarlo de nuevo y posteriormente fue trasladado a otro centro más grande para prevenir un nuevo susto.
