La coalición navarra ha celebrado con moderada alegría la victoria de su formación y realiza una lectura en clave regional
No ha habido grandes aspavientos, ni gritos de alegría a pesar de que la victoria de UPN-PP en Navarra ha sido contundente. Sin embargo, han hecho una lectura clara, “Navarra no es nacionalista, es foral, española y se siente orgullosa de formar parte de España”, ha afirmado el presidente de UPN, Javier Esparza.
También desde el Partido Popular se ha hecho una lectura en clave regional de estos resultados. “Señora Barkos, segundo aviso en seis meses. Rectifique, está a tiempo”, ha pedido el presidente de la gestora del PP, Pablo Zalba. Incluso se ha tendido la mano a Geroa Bai. “Si por fin decide gobernar para todos, no nos tendrá enfrente”. Pero también ha dejado caer que "si decide seguir como hasta ahora, nos tendrá más enfrente que nunca".
En esta misma línea, Javier Esparza, ha remarcado que “el partido de la presidenta Barkos es la sexta fuerza en Navarra. Los ciudadanos le han puesto donde se merece”. Y por eso, Esparza ha remarcado que “con la misma humildad pero con más ganas, vamos a seguir trabajando. Ese es el reto, darle la vuelta a esto dentro de 3 años”.
En el hotel Iruña Park de Pamplona se han reunido varias decenas de militantes y simpatizantes que han aplaudido las intervenciones de los presidentes de los dos partidos y los candidatos, pero también han aplaudido cuando en la televisiones se veía a Soraya Saéz de Santamaría anunciando la victoria del Partido Popular a nivel nacional y también han aplaudido con ganas cuando Mariano Rajoy ha salido al balcón de la sede del Partido Popular.
También desde el Iruña Park se han hecho referencias nacionales. “Espero que se respete lo que los ciudadanos han dicho”, ha afirmado Javier Esparza, “porque los ciudadanos han votado convivencia, respeto”. Para Pablo Zalba, “los españoles han votado la moderación, la sensatez” y por eso ha pedido “que el PSOE respete la decisión de los españoles”.
