• viernes, 19 de abril de 2024
  • Actualizado 11:23
 
 

POLITICA

El padre del último guardia civil navarro asesinado por ETA: "Soy víctima de un hijo robado"

El diputado de Vox por Baleares, Antonio Salvá, realizó su primera intervención en el Congreso de los Diputados.

Toni Salvá, diputado de Vox, en el Congreso TWITTER
Toni Salvá, diputado de Vox, en el Congreso. TWITTER

El diputado de Vox por Baleares, Antonio Salvá, dejó este pasado miércoles una de las imágenes de la sesión de control al Gobierno en el Congreso de los Diputados. 

Antonio Salvá es el padre de Diego, el guardia civil navarro que fue asesinado por ETA, junto a su compañero Carlos Sáenz de Tejada, durante un atentado en el año 2009 en Palma.

"Hablando de los niños robados, que es el peor de los crímenes que hay, yo soy víctima de un hijo robado", afirmó Salvá mientras mostraba la foto de su hijo y la del atentando.

Además, Salvá señaló que quemaron vivo a su hijo junto a su compañero "vilmente por la banda criminal y asesina ETA".

UN ASESINATO QUE NO ESTÁ RESUELTO

Ni un papel. Nada. La Guardia Civil buscó durante años alguna pista que diera luz a la autoría del último atentado mortal de ETA, el que hace una década acabó con la vida del guardia civil de origen navarro Diego Salvá y su compañero Carlos Sáenz de Tejada en Mallorca, pero todas las pistas acabaron en saco roto.

El 30 de julio de 2009 una bomba-lapa colocada en los bajos de un coche patrulla de la Guardia Civil hizo explosión en el cuartel de Palmanova con los dos agentes dentro y a unos cientos de metros de las playas donde esos días veraneaban 30.000 personas.

No era la única lista para hacer explosión. En un vehículo próximo había un segundo artefacto que fue detectado gracias a un perro policía y detonado de forma controlada. Solo once días después estallaron tres de baja intensidad en diferentes puntos de la capital balear sin causar heridos.

Las incógnitas en torno a este atentado son todas. Nada más estallar, la Delegación del Gobierno en Baleares puso en marcha la "operación Jaula" para controlar las salidas de Mallorca por aire o por mar. Parecía que, al tratarse de una isla, sería más fácil localizar a los etarras, pero no fue así.

"Es alucinante, no hay nada. Y la Guardia Civil está desesperada con ese tema. Te preguntas: ¿cómo es posible no se haya podido sacar nada de información, ningún vuelo, ningún barco? Posiblemente, me decían, podían ser legales, gente que no estuviera fichada y que vivía en el País Vasco tan tranquila".

Son las palabras de Daniel Portero, presidente la asociación de víctimas del terrorismo Dignidad y Justicia, personada como acusación en el juzgado que aún lleva el caso, el central de instrucción 4 de la Audiencia Nacional, donde los tomos de la causa no destacan por su abundancia.

Fuentes de la investigación corroboran a Efe que, pese a que la Guardia Civil nunca ha abandonado las pesquisas y que se han seguido numerosas pistas, todas han resultado infructuosas. "No desistimos y seguimos trabajando", aclaran.


  • Los comentarios que falten el respeto y que no se ciñan al tema de la noticia, podrán ser eliminados.
  • Cada usuario será el único responsable de sus comentarios.
El padre del último guardia civil navarro asesinado por ETA: "Soy víctima de un hijo robado"