El consejero de Presidencia, Igualdad, Función Pública e Interior del Gobierno foral y vicepresidente, Javier Remírez, ha manifestado este miércoles que la nueva estructura del Gobierno foral, que supone un aumento de coste de 6 millones de euros, "no es una carga" o "no puede medirse y leerse sólo desde la perspectiva del coste". "Es una apuesta consciente", ha aseverado.
En comisión parlamentaria, a petición de Navarra Suma, Remírez ha detallado que "el Gobierno ha dimensionado su estructura conforme a las necesidades y retos que creemos tiene que afrontar Navarra para seguir bien posicionada en un lugar preferente en los próximos años".
Según ha indicado, "la nueva estructura de este Gobierno se ha definido para trabajar de forma específica, efectiva y transversal en materias que consideramos estratégicas como la innovación, la transformación digital, la especialización educativa, la igualdad, la mejora de la calidad del empleo o el equilibrio y la cohesión territorial".
Ha defendido que el Gobierno foral "ha pensado en un organigrama efectivo para dar cumplimiento a unas líneas políticas, un organigrama capaz de atender las necesidades que plantea nuestra sociedad y además, hemos querido ponerlo en funcionamiento desde el principio de la legislatura". Incluye 13 departamentos y 42 direcciones generales o gerencias de organismos autónomos a los que hay que sumar sus correspondientes gabinetes, secretarías generales técnicas, direcciones de servicio, etc. y su personal.
Según ha dicho, "es una estructura que no difiere mucho y que además no llega a tener la dimensión de la que presentaba el Gobierno de Navarra en legislaturas anteriores a la crisis en los gobiernos presididos por UPN en solitario o en coalición con el CDN".
Remírez ha indicado que "en la legislatura 2007-2011, el Gobierno de Miguel Sanz llegó a contar -y cito datos del año 2008- con 156 cargos de libre designación frente a los 142 puestos de estas características que hay actualmente en el Gobierno". "En el año anterior, 2007, fueron 152 y en el posterior, 2009, 146 puestos", ha indicado, para exponer que en el año 2010 el Gobierno contaba con los mismos cargos de libre designación que los del Gobierno actual.
La nueva estructura supone un incremento del coste de 6.062.393,87 euros. "En este aumento incluyo 4 consejeros más, 12 direcciones generales o gerencias de organismos autónomos más, 3 subdirecciones de organismos autónomos más, 16 direcciones de servicio más, 56 nuevas jefaturas de sección, 4 secretarios técnicos, 4 nuevos jefes de gabinete y 2 auxiliares de gabinete", ha indicado.
Ha expuesto que de estos 101 puestos, "un total de 76 deben ser desempeñados por funcionarias o funcionarios de la propia Administración o adscritos a la misma, por lo que menos de un 30% de los nuevos puestos son de libre designación".
El vicepresidente ha señalado igualmente que "de los 6.062.393,8 euros, 1.347.973,97 euros - más del 22% del total - se financian con las plazas básicas de los empleados que se han nombrado para desempeñar las nuevas jefaturas aprobadas y con los Negociados que en las memorias que acompañaban a los Decretos Forales se proponen amortizar". "Por consiguiente, el coste total anual del cambio de estructura minorado en la parte financiada con el propio capítulo 1 es 4.714.419,90 euros", ha añadido.
Ha manifestado que "el nuevo organigrama del Gobierno de Navarra es una apuesta consciente, que además está sujeta a disponibilidad presupuestaria y que se ha desplegado para dar prioridad desde el principio a los ejes políticos que se incluyen en el acuerdo de legislatura firmado por los socios".
Ha defendido Remírez que "este organigrama se ha cerrado además con previsión y rigor" y "se pone en marcha en un momento económico posibilista (con previsiones de crecimiento, tanto en el PIB, como en la recaudación) y que permite por tanto ir superando épocas de austeridad".
La parlamentaria de Navarra Suma Marta Alvárez ha criticado que "había que pillar moqueta a cualquier precio", con "101 cargos más". "El incremento es de 6 millones, cifra nada desdeñable y con ese dinero se pueden hacer muchas cosas, arreglar carreteras, contratar médicos...", ha expuesto, para indicar que "es un modus operandi de los gobiernos socialistas, ustedes gastan y pagamos los demás". "El dinero público es de los navarros", ha afirmado.
El socialista Ramón Alzórriz ha señalado que apoyan la nueva estructura de Gobierno porque "emana de un acuerdo de legislatura con prioridades sociales". "Cuando un Gobierno quiere solventar con solvencia, con rigor, sus prioridades tiene que tener la estructura pertinente", ha dicho y ha comentado que "el grueso de la estructura de Gobierno viene de la Función Pública, de profesionales que ya están".
Desde Geroa Bai, Blanca Regúlez ha señalado que su grupo ya transmitió que "no está conforme con este crecimiento de estructura" si bien ha señalado que era necesario ampliar la estructura y que "se hiciera con menor austeridad que la legislatura pasada". "Nos genera dudas el crecimiento de los departamentos con el consiguiente costo que ello conlleva y no calendarizado en el tiempo", ha indicado, para afirmar que debía haber sido un crecimiento con "mayor moderación".
El parlamentario de EH Bildu Adolfo Araiz ha indicado que ha sido una "torpeza" cómo ha gestionado este tema el Gobierno. "Se ha producido un incremento en la estructura y hubiera sido más honrado por el Gobierno decir las cosas como son", ha expuesto, para apuntar que "esto responde a intereses partidistas y reparto de cuotas de poder".
Por su parte, Ainhoa Aznárez, de Podemos, ha señalado que "no he oído mucho revuelo en la ciudadanía con este tema" y "es normal que cualquier aliado de Gobierno tenga su parte correspondiente en un Gobierno de coalición". "Esta estructura tendrá su respuesta dentro de 4 años, veremos si ha merecido la pena, si este Gobierno de coalición ha merecido la pena y yo creo que sí", ha manifestado.
