El Gobierno de Navarra, de la mano de su vicepresidente Javier Remírez, ha anunciado que acata la sentencia del Tribunal Superior de Justicia de Navarra que obliga a indemnizar a NAVARRA.COM por la discriminación sufrida por este medio al apartarlo del reparto de publicidad institucional de 2017, 2018 y 2019, bajo mandato de Uxue Barkos.
En su momento, la sentencia confirmó que la presidenta Uxue Barkos, la consejera Ana Ollo y el director general de Comunicación, Pello Pellejero, establecieron un sistema de reparto de dinero público sin ningún tipo de criterio objetivo, más de 1,3 millones de euros anuales, con el único propósito de repartirlo de manera arbitraria y beneficiar así a los medios que ellos considerarán oportunos.
La Sala de lo Contencioso-Administrativo del Tribunal Superior de Justicia de Navarra dio la razón a este medio y se conoce ahora que el Gobierno de Chivite no recurrirá dicha sentencia, si bien ha parecido no tener demasiada relevancia para Javier Remírez, quien ha valorado que esta decisión "tendrá consecuencias muy limitadas en el Ejecutivo", ignorando que esta cuantía tendrá que salir del bolsillo de todos los navarros y no de los políticos responsabilizados por la sentencia.
"La cuantía a pagar será próxima a los 38.000€. Eso no responde más que al 1,1% del presupuesto destinado a publicidad institucional", ha declarado en la comisión solicitada a instancias del grupo parlamentario Navarra Suma.
Una actitud que le ha reprochado el parlamentario de este grupo Carlos Pérez-Nievas, al señalar que el vicepresidente pasa por alto el reparto "injusto y arbitrario el dinero público de todos los navarros" y mantiene en puestos de poder a Ana Ollo, encargada de los repartos ilegales por los que se debe indemnizar a NAVARRA.COM.
"Da igual si tiene que pagar mucho o poco. Se trata de un reparto de 5 millones de euros de todos los navarros que se repartían de forma arbitraria y que se siguen distribuyendo de la misma forma", ha asegurado." Ana Ollo repartió un dinero público de manera injusta e ilegal porque un medio de comunicación no era de su gusto y no querían darle un duro. No recurrir es un reconocimiento de que se hizo todo mal".
De igual forma, ha dejado ver que el actual gobierno mantiene unos repartos similares en cuanto a objetividad al no basarse en una auditoría externa que estudia las audiencias sino en una encuesta contratada y que segmenta la realidad. "Ustedes han mantenido variables políticas o lingüística inaceptables dando más dinero a otros medios que cuentan con menor audiencia que NAVARRA.COM", ha señalado el parlamentario foral.
Unos criterios objetivos, que en la pasada legislatura el compañero de Javier Remírez y parlamentario socialista, Guzmán Garmendia, reivindicaba una y otra vez pidiendo el uso de datos de audiencia de la empresa Comscore, en contraposición a los datos facilitados por CIES, que no dejan de ser una mera encuesta, que decide obviar ahora el vicepresidente.
Por su parte, desde el PSN, las declaraciones su parlamentaria Inmaculada Jurío abren la puerta a que la expulsión de NAVARRA.COM del reparto de publicidad institucional se debió a la actitud "beligerante" de este medio contra Barkos y que "continúa siéndola" con el actual gobierno.
"Usted ha cumplido su minuto de gloria. Me parece muy triste y muy pobre para atacar de sectario el reparto basándose en una sentencia que Dios le ha venido a ver”, ha reprochado a Pérez-Nievas, sin ofrecer argumentos en sus respuestas.
Una posición, la de no compartir la sentencia, que han defendido a capa y espada tanto Geroa Bai como Bildu quienes han señalado que "no leen este medio por salud mental" o que "la publicidad institucional es injusta con los medios en euskera".
En el caso de Geroa Bai, su postura se ha basado en atacar al tribunal que ha ejecutado la sentencia exponiendo que "han utilizado argumentos no jurídicos por lo que no es objetiva".
"Al tribunal no le gusta que el estudio de la audiencia se haga por CIES (el cual no representa la audiencia real de un medio) y por eso elige COMSCORE (plataforma establecida a nivel internacional para el estudio de las audiencias digitales)", ha afirmado en su intervención Blanca Regúlez.
Por parte de Bildu, Bakartxo Ruiz ni siquiera se ha atrevido a argumentar en cuanto al contenido de la sentencia y ha basado su discurso únicamente en posiciones políticas, haciendo uso de su sectarismo, atacando a Navarra.com y obviando que la publicidad institucional tiene como único fin difundir los mensajes y campañas del gobierno al mayor número posible de ciudadanos.
De igual manera, Ruiz tampoco ha hecho referencia a una condena similar protagonizada por Joseba Asirón y EH Bildu cuando, al frente del Ayuntamiento de Pamplona, repartieron 4 millones de euros sin ningún criterio objetivo, motivo por el que la adjudicación fue anulada y declarada ilegal por la misma Sala que ahora condena al Gobierno de Navarra.
Así , su intervención se ha basado únicamente en denunciar que ciertos medios de comunicación han sido inflados por la publicidad institucional, otorgándoles una posición privilegiada. Un hecho similar a lo que podría acusarse a los medios en euskera, que mismamente el año pasado recibieron cerca de un millón de euros de dinero público en subvenciones, y que sin embargo no ha querido mencionar.
