El pleno del Parlamento de Navarra ha aprobado este jueves el proyecto de ley foral de Cuentas Generales de Navarra de 2019, año en el que la Comunidad foral cerró con 148,5 millones de superávit (un 285% más que el año anterior), un remanente de tesorería positivo con casi 140 millones de euros, un ahorro neto de 85 millones y una disminución de la deuda por debajo de los 3.000 millones de euros.
Un informe elaborado por Comptos señala que Navarra cumplió las reglas fiscales en términos de estabilidad , salvo la referida a la regla del gasto.
El proyecto de ley ha sido aprobado con el voto a favor de PSN, Geroa Bai, EH Bildu, Podemos e Izquierda-Ezkerra, mientras que Navarra Suma ha votado en contra.
En la presentación del proyecto de ley, la consejera de Economía y Hacienda, Elma Saiz, ha afirmado que el informe de la Cámara de Comptos relativo a las cuentas generales ya emitió opinión favorable en los ámbitos financieros y de legalidad.
Salud fue el capítulo de gasto más importante, el 42% del total, y a educación se destinó el 16%, "lo que pone de manifiesto el compromiso de este Gobierno de Navarra por el gasto social en dos pilares básico del Estado de Bienestar como la salud y la educación", en palabras de Elma Saiz.
No obstante, la consejera ha reconocido que las cuentas de 2019 se llevaron a cabo en una "situación muy diferente a la actual". "En poco tiempo tendremos las cuentas de 2020 y por culpa de la pandemia que estamos teniendo a todos los niveles la situación es bien distinta", ha dicho, para afirmar, no obstante, que "si algo van a tener en común las dos cuentas es el esfuerzo de este Gobierno por gestionar de la mejor forma posible los recursos que están a su alcance con rigor, con responsabilidad y con una clara vocación de servicio público".
La parlamentaria de Navarra Suma María Jesús Valdemoros ha explicado que su grupo vota en contra de este proyecto porque el Gobierno "incumplió la regla de gasto en un año de crecimiento, adoptó una visión cortoplacista de concesiones políticas de contentar a uno y otros socios, perdiendo de vista que la sostenibilidad del sistema de bienestar se pone en peligro si no pensamos en el medio plazo, porque nos dejaron en un momento de crecimiento económico en una posición poco adecuada para afrontar una coyuntura desfavorable". "Chivite es presidenta desde mitad de 2019, por lo que tenía todo a su favor para haber hecho algo distinto a sus predecesores. Hablamos de unas cuentas que iban a ser la bisagra entre dos Gobiernos, pero que en la práctica han terminado siendo el mismo", ha afirmado.
La parlamentaria del PSN Ainhoa Unzu ha destacado que las cuentas de 2019 reflejan una "notable mejoría de los indicadores que definen la situación financiera en la Comunidad foral y el saneamiento de las cuentas, que sin duda han contribuido a afrontar mucho mejor y con más recursos la crisis sanitaria y económica por la pandemia". No obstante, ha reconocido que "es evidente que esta mejoría no va a tener continuidad" en las cuentas de 2020 y ha defendido que "los fondos europeos serán una verdadera oportunidad de desarrollo, de modernización, de transformación y de recuperación económica y social".
La portavoz de Geroa Bai, Mikel Asiain, ha afirmado que los datos del superávit y el remanente de tesorería "indican sin duda una muy buena gestión fruto de unos Presupuestos adecuados, resultado de unas medidas fiscales adecuadas durante los cuatro años precedentes, no solo viento de popa empujando". Al igual que el PSN, ha reconocido los efectos que va a suponer la crisis provocada por el Covid-19 y ha señalado que "las ayudas europeas van a ser básicas".
El parlamentario de EH Bildu Adolfo Araiz ha advertido de que "abrir la persiana a la Administración le supone el 47% de gasto, que es lo que representan el gasto de personal y los gastos corrientes". "Es una estructura que se viene heredando año tras año y sobre la que hay que tener capacidad de repensar", ha planteado. También ha llamado la atención sobre la situación de "altísima temporalidad" en el empleo público, "un tema al que le vamos a tener que hincar el diente más pronto que tarde". "El personal de Osasunbidea está en índices de temporalidad del 60% y el de Educación en el 49%. Estamos en una situación insostenible", ha dicho.
Por parte de Podemos, Mikel Buil, ha señalado que al analizar las cuentas de 2019 parece que ha pasado "un siglo", teniendo en cuenta el escenario actual de pandemia, y ha afirmado que "el informe de Comptos es favorable y los indicadores son apropiados salvo alguna salvedad, pero el análisis que podemos hacer hoy es poco útil para lo que nos viene". Buil se ha sumado al debate abierto por EH Bildu sobre la temporalidad en la Administración y ha esperado que se avance en "un empleo de mayor calidad". También ha esperado que con los fondos europeos pueda haber más gasto destinado a inversiones por ejemplo en el ámbito deportivo, cultural y sanitario. Por último, ha reclamado "trabajar de otra manera las subvenciones a entidades culturales" para que puedan mejorar la planificación de actividades.
La portavoz de Izquierda-Ezkerra, Marisa de Simón, ha afirmado que las cuentas de 2019 "quedan muy lejos con todo lo que ha acontecido en estos meses", pero ha considerado que "son unas cuentas que reflejan con claridad la prioridad del gasto y la inversión social que se estableció en el acuerdo de programa de Gobierno de la legislatura pasada". "Evidentemente, las cuentas también reflejan problemas, como todo lo que tiene que ver con la temporalidad y con el sistema de acceso a la función pública, es un tema muy difícil", ha señalado, para afirmar que la solución pasa por convocar ofertas públicas de empleo "masivas".
