Los grupos parlamentarios de Navarra han coincidido este lunes en la necesidad de que la Comunidad foral aumente su deuda y modifique los presupuestos del año 2020 para hacer frente a la crisis sociosanitaria derivada de la pandemia del Covid-19.
Así lo han manifestado los representantes de los grupos en la rueda de prensa posterior a la Mesa y Junta de Portavoces celebrada esta mañana de lunes, donde se han mostrado partidarios a establecer medidas encaminadas a aumentar la liquidez para evitar futuros recortes.
Por parte de Navarra Suma, Javier Esparza ha considerado que “es inevitable modificar el presupuesto del 2020”, ya que este se aprobó con una previsión económica que “se va a ver modificada de forma sustancial”, y ha destacado la labor de su grupo, que ha presentado “más de 40 propuestas en todos los ámbitos” durante los últimos dos meses.
No ha querido posicionarse sobre si es mejor aumentar la deuda o implementar recortes, ya que “corresponde al Gobierno de Navarra decidir”, y este no les ha facilitado los datos pertinentes a pesar de que, ha asegurado, ya se los han pedido.
Ramón Alzórriz, del PSN, ha puesto en valor que la Comunidad foral cuenta con “unos presupuestos expansivos en una época de desaceleración económica”, y ha estimado que estos se deben reorientar para priorizar las medidas urgentes necesarias para la reactivación económica.
El secretario de Organización del PSN ha apostado por la flexibilización de la regla de déficit, una mayor permisibilidad de la ampliación de la deuda y en el uso de los fondos procedentes tanto del Gobierno de España como de la Unión Europea.
PRESUPUESTOS EUROPEOS
Uxue Barkos, de Geroa Bai, ha sumado a la revisión de los presupuestos de Navarra la necesidad de trabajar ya en los presupuestos europeos 2021-2027, que “van a tener una enorme importancia en la financiación de proyectos que van a permitir a cada una de las regiones salir con mayor fuerza de esta crisis”.
También ha calificado de prioritario y urgente establecer una “batería global” de medidas económicas como la emisión de deuda y el estudio de la participación de Navarra en los 16.000 millones en fondos no reembolsables anunciados por el Gobierno central.
“Estamos viendo cómo muchos de esos fondos ICO están sirviendo no tanto para aportar liquidez directa a las empresas como para refinanciar deuda anterior”, ha manifestado Barkos, que ha subrayado que, a su entender, “es una mala manera de encarar la situación”.
Mikel Buil, de Podemos, ha planteado que, con un escenario de menor poder adquisitivo y una reducción de la recaudación, “habrá que pensar en emitir deuda o fuentes de financiación alternativa antes de caer en recortes”, y ha evidenciado que el presupuesto “se está modificando sobre la marcha, especialmente con este modelo de cogobernanza que se ha puesto para poder reactivar Navarra”.
DIAGNÓSTICO CLARO
En esta materia, Buil ha pedido especial seriedad y honestidad a la consejera de Hacienda, puesto que “necesitamos un diagnóstico claro sobre cómo se ha visto afectado y se va a ver afectado el presupuesto”.
Para Bakartxo Ruiz, de EH Bildu, la clave no está en hacer ahora una modificación de los presupuestos, sino de establecer prioridades y conocer qué acceso va a tener Navarra a los fondos europeos y estatales, ya que, “si tuviéramos un acceso directo, tendríamos un colchón que nos permitiría hacer unas proyecciones más exhaustivas”.
Asimismo, ha apostado por derogar las limitaciones de la Ley de estabilidad presupuestaria, para que el Gobierno pueda destinar sus remanentes y plantear la modificación del objetivo de déficit, y ha propuesto la creación de una tasa Covid, puesto que “la justicia fiscal y la redistribución, ahora más que nunca, van a ser necesarias”.
En la misma línea se ha pronunciado Marisa de Simón, de I-E, que ha reivindicado la derogación de la Ley de estabilidad presupuestaria, así como el desarollo de una reforma fiscal en Navarra y el Estado para conseguir un aumento de los ingresos, ya que “sufrimos una fiscalidad que no es justa ni progresiva”. Ha apuntado que “no puede ser que las rentas del trabajo estén contribuyendo mucho menos que las rentas del capital”.
IMPUESTO DE SOCIEDADES
De Simón ha insistido en que “hay que abordar el impuesto de sociedades, los impuestos a los grandes beneficios empresariales y a las rentas del capital”, para lo que ha planteado un impuesto especial “para que la riqueza contribuya en mayor medida en esta situación tan crítica en la que nos encontramos”.
“Nuestra propuesta es una salida social y justa a esta crisis, y eso exige romper con el marco neoliberal actual y con las recetas de los mercados”, ha subrayado De Simón en la rueda de prensa.
